Era un domingo de lo más normal, las cinco y media de la tarde y el frío de noviembre empezaba a hacerse notar. Justo en ese momento, estaba teniendo lugar una triple conexión Sevilla-Asturias-Madrid. Así dábamos comienzo a la entrevista de Jorge (19) y Omar (26), dos amigos asturianos, que hace poco decidieron unir su talento para la música y transmitirlo a los demás a través de su grupo: Intrusos.
Aunque ambos son de Avilés, los estudios y el trabajo los han llevado a moverse de un lado para otro. Jorge estudia actualmente Iluminación, captación y tratamiento de imagen en Oviedo, mientras que Omar, quién estudió Telecomunicaciones, se encuentra trabajando en Madrid como profesor, desde septiembre. Ambos tratan de compaginar las obligaciones del día a día con su pasión por la música. Y sin duda, lo están consiguiendo.
Para empezar, volvamos tiempo atrás… ¿De dónde os viene la pasión por la música? ¿Recordáis desde cuando la sentís de esta manera?
O: No te sabría decir realmente de dónde o desde cuándo, porque llevo toda la vida con la música, mis primeros recuerdos ya son cantando. Además, por lo que me cuentan mis padres, incluso antes de empezar a hablar ya tarareaba la música de los anuncios de la televisión.
J: Yo tampoco sabría decirte en qué momento me di cuenta de que la música era una parte esencial en mi vida, ya que siempre ha estado presente. Sin embargo, según va pasando el tiempo te das cuenta de que le das prioridad sobre otras cosas, que quizá si la tienen para el resto de personas de tu edad.
A la vista de que la música ha formado siempre parte de vuestro día a día, ¿qué formación musical tenéis cada uno?
J: La verdad es que mi atracción por la guitarra surgió a una edad muy temprana, empecé a tomar clases con 7 años y alrededor de los 11 formé mi primera banda: Rock Rules. Dábamos pequeños conciertos en nuestra ciudad, y venía nuestra gente a vernos. Después de esta etapa, estuve un tiempo tocando en solitario, también daba conciertos por bares. El hecho de haber estado tocando tanto tiempo te aporta mucha experiencia y seguridad. Actualmente a pesar de que toco con dos bandas más: Tsarigando y Punto Pop, podría decir que Intrusos es la principal.
O: En mi caso, todo empezó cuando tenía 9 años y vi a Fran Perea en Los Serrano. Me inspiró y quise empezar a tocar la guitarra. Como económicamente mi familia no se podía permitir las clases, mis padres me apuntaron a la parroquia de mi barrio, donde daban clases de guitarra por 3 euros. Estuve solo 1 año, luego lo dejé, así que realmente de guitarra no controlo demasiado. Fue más tarde, a los 16 años, cuando me apunté a una academia de canto en la Fundación de música de Avilés, estuve en ella casi 8 años. Pero sin duda, creo que la mayor formación que he podido recibir fue la que tuve cuando trabajé con orquestas.
Pasemos a la actualidad… ¿Cómo surgió la idea de formar un grupo juntos? y, ¿Por qué elegisteis el nombre de Intrusos?
O: La idea del grupo fue totalmente improvisada. Yo estaba realizando un proyecto de arte joven en Avilés, para que los chavales con talento tuviesen un espacio en el que mostrar lo que hacían. Un día cuando Jorge estaba por allí para tocar le propuse que nos juntáramos y lo hablásemos. Y hasta ahora.
En cuanto al nombre… (risas) tenemos dos versiones. La versión que solemos contar es que como en un principio nosotros nos habíamos conocido en un camping, y en ese momento éramos como dos intrusos, se nos ocurrió el nombre. Pero, la versión real, es que no teníamos ni idea de qué nombre ponerle al grupo y cuando un día yo estaba de fiesta en un bar que se llama El intruso, se lo propuse a Jorge y dijimos: ¿Por qué no?
¿Cómo os organizáis para componer las canciones?
J: Normalmente Omar es el que suele escribir las letras, salvando alguna canción. Mientras Omar compone yo busco la instrumental. A veces nos pasa que él tiene un ritmo ya en la cabeza, me da la letra con ese ritmo y cuando yo lo modifico tenemos algún que otro debate para darle la vuelta o lo que haga falta. Básicamente, la instrumental realmente sale de una mezcla entre el ritmo que tiene en mente Omar y lo que se me ocurre a mi improvisando o escuchando a otros grupos.
Al final lo bueno de no tener mucho dinero es que tenemos mucho tiempo para crear. Es decir, no pensamos ningún estilo en concreto para una canción, a lo mejor vamos en el tren y se nos ocurre algo, lo metemos y luego suena distinto o lo que sea. Vamos improvisando en el momento. Al no meternos en un estudio como tal a grabar y estar más limitados de tiempo, pues nos lo tomamos con más calma, el proceso creativo es más libre y le dedicamos más tiempo para que suene como verdaderamente queremos.
¿Qué queréis transmitir con vuestra música?
O y J: Queremos contar historias, tanto con las letras como con la instrumental, basadas en nuestras experiencias, mostrar una parte de nosotros y que la gente se sienta identificada cuando nos escuche. Que con cada acorde puedan transportarse a donde quieran, incluso dándole su propia interpretación a nuestras canciones, eso es lo increíble de la música.
Además, también creemos que es una oportunidad para el público de escuchar cosas nuevas. Sonidos que probablemente les recuerden a grupos de su infancia, estilo Pop-Rock, que ahora no vende tanto como otras cosas. Esa es nuestra esencia, nosotros apostamos por la música que nos llenó de vida y nos hizo soñar cuando éramos pequeños.
Vuestro primer single Qué pena me das y el segundo, Lola, salieron el año pasado. Habladnos un poco de ellas.
O: Qué pena me das es una canción escrita totalmente desde el rencor. Es el sentimiento que te produce ver a esa persona con la que lo dejaste hace un tiempo, te dice que está genial y tú te niegas a creerlo. Piensas que después de 5 años de relación esa persona tiene que estar mal, aunque no es así. No es algo que sea real, sino un sentimiento que nace de la negación absoluta que te produce la situación, al ver a ese amor de tantos años. Por otro lado, Lola es la personificación de la ansiedad.
J: Así es, con Lola lo que queremos decirle a la ansiedad, tanto con la letra como con la instrumental es: que te den, voy a poder contigo. Por eso le metemos tanta caña al ritmo, es una manera de desahogarnos.
¿En qué os inspiráis para escribir?
O: Literalmente en mi vida. Suelo ser muy explícito al escribir las canciones, no me gusta maquillar las cosas. De hecho, ahora estoy escribiendo una canción de lo más fiel a mi día a día. Resulta que yo voy por las mañanas a trabajar en metro, y como ahora con las mascarillas solo se puede ver media cara a la gente, pues creo que me enamoro todos los días tres o cuatro veces (risas). Por eso, la canción que estoy haciendo se llama Amor en metro.

¿Qué nuevos proyectos tenéis en mente? ¿Dónde podremos escucharlos?
J: En un principio, habíamos pensado en grabar un par de temas más para una maqueta y así poder enviarla a las productoras para ver si les interesaba nuestra música, y si no, arriesgarnos por nuestra cuenta. Pero, con la nueva situación en la que nos ha dejado el Covid-19 ya no lo tenemos tan claro y creemos que tal vez lo mejor será sacar un EP.
O: Exacto. El EP sería una buena manera de presentar nuestro trabajo, ya que lo que se pide ahora mismo en la industria de la música es algo que esté lo más formado posible, sin llegar a ser un producto completamente sólido. Sin necesidad de estar mega producido, el EP, se puede subir a las plataformas digitales para que lo escuche la gente y al mismo tiempo hacerlo llegar a los productores.
Nuestro trabajo podéis escucharlo en todas las plataformas digitales, nos llamamos en todas intrusosmusica. Estamos en Spotify, YouTube, Instagram, Twitter, Facebook etc.

Y para terminar... esta pregunta es algo irónica dada la situación actual pero, ¿Cómo os veis dentro de cinco o diez años?
J: Es algo difícil de decir actualmente, pero buscamos hacernos un nombre, tal vez no ser muy famosos, pero por lo menos que sonemos y poder hacer conciertos que se llenen, sean donde sean. Poquito a poco, primero con la gente de casa y luego ir abriéndonos camino.
O: Compaginando nuestros trabajos personales con la música sin duda. Es un mundo complicado, pero con esfuerzo se pueden lograr cosas. Nos encantaría poder invertir más dinero en nuestros proyectos musicales para hacerlos más profesionales e ir avanzando.