Operación Camarón: Mucho ruido, pocas gambas

Otra comedia de la mano de Mediaset que se ha promocionado a bombo y platillo y que, en la tónica habitual de la compañía, se trata de un remake del filme italiano Song’ e Napule (Manetti & Manetti, 2013). Pero, ¿es Operación Camarón (Therón, 2021) una comedia desternillante o solo un montón de humo fruto de una hiperbólica promoción?

Ya lo explicaban Mike Stoklasa y Jay Bauman (los creadores del canal de YouTube RedLetterMedia) en su análisis del remake de Cazafantasmas (Feig, 2016): la comedia es probablemente el género más difícil de analizar porque hay muchas formas de decir «es que simplemente no me hizo reír«. Esta crítica no busca realizar un análisis objetivo ni sentar cátedra, ya que cualquier reseña está parcialmente sesgada por la opinión de quien la escribe. Aclarado esto, comencemos por la sinopsis.

Sebas «El Cojonera» (Julián López) entregado a su teclado durante una boda. Fuente: espinof.com

La premisa, partiendo y relocalizando la del film italiano anteriormente citado, es la siguiente: Sebas (Julián López) es un pianista frustrado que trabaja como policía (previo enchufe familiar) para la unidad antidroga en Cádiz. Un día, la inspectora Josefa Garrido (Miren Ibarguren) y sus compañeros (Canco Rodríguez y Julián Villagrán) lo escuchan tocar el piano y se les ocurre una «brillante» idea. En consecuencia, Sebas se hará pasar por teclista para infiltrarse en la banda de flamenco-trap «Los Lolos» capitaneada por el susodicho Lolo (Carlos «Nene» Librado), con la intención de colarse en la boda de la hija de Abeledo (Antonio Dechent), el lugarteniente del misterioso narcotraficante apodado «El Fantasma». Por el camino, se labrará una fuerte amistad con los integrantes del grupo, especialmente con Luci (Natalia de Molina), la hermana y mánager de Lolo. Así, las mentiras y los malentendidos irán tejiendo una red en torno a la vida de Sebas, hasta el punto de que su lealtad por ambos bandos será puesta a prueba.

Mi principal problema con la película es, insisto, totalmente subjetivo: no disfruto con el humor basado en estereotipos y localismos y la película se construye en torno a eso.

Lolo (Carlos «Nene» Librado) discute con su hermana Luci (Natalia de Molina). Fuente: telecinco.es

Una muestra clara de los tópicos en Operación Camarón (rodada entre Cádiz y Sevilla) es la presentación del personaje de Lolo en un bar. En dicha escena, aparece un niño que empieza a tocar la guitarra «con mucho arte». El punto del guion es mostrar que el talento es, en parte, innato. Para cuando el chiquillo acaba con su pequeño concierto, Lolo, mientras mira a Sebas, le pregunta al pequeño: «¿Tú has ido a solfeo?» a lo que el muchacho responde: «Tú si que eres feo, cabrón». Acto seguido, el cantante invita al menor a tomar lo que quiera y este pide a gritos un gin tonic.

Otra píldora de la dinámica cómica de la cinta se evidencia en la presentación del personaje de «Fotosho» (Xisco González), un chico de Granada que forma parte de los Lolos. ¿Cuál es el mayor estereotipo que se suele decir sobre la gente de allí? Efectivamente, la «mala follá«. Pues ahí está la premisa con la que se juega todo el rato en torno a su personaje…

Los dos «destripes» anteriormente mentados no son spoilers por gusto, sino que evidencian las claves narrativas que construyen el humor de la película. Al conocerlas, cualquiera que lea esta crítica puede esbozar si el filme casa con su sentido del humor y decantarse por verla o no. Cierto es que el trailer y spots con los que se ha bombardeado al espectador español medio ya apuntan a este tipo de gracietas, pero toda advertencia es poca.

«Los Lolos» al completo. De izquierda a derecha: Sebas, Ortiguilla (Juanlu González), Luci, Lolo y «Fotosho». Fuente: KISS FM.

Pero incluso teniendo un buen guion, cualquier comedia puede desmoronarse si no cuenta con los actores adecuados. En el caso de Operación Camarón, hay una de cal y otra de arena, ya que cuenta con actores de gran talento como Paco Tous, Antonio Dechent, Alberto López o Adelfa Calvo. Dechent, que interpreta a uno de los dos antagonistas principales, llena la pantalla con su presencia y se convierte en un personaje verdaderamente amenazante. Para muestra de ello, bastaría con fijarse en una escena cercana al tercer acto, en la que, mientras sostiene a un gallo de peleas, advierte a los Lolos con un pequeño monólogo.

Sin embargo, otros intérpretes como Tous son desechados de una manera tan absurda (en su caso, dos chistes de chirigotas y un par de gritos) que uno no puede evitar sentirse frustrado ante semejante desperdicio.

Así mismo, la película no solo juega con clichés narrativos, sino que convierte a algunos de sus actores en tópicos con patas. ¿Cuántas veces vamos a ver a Julián López encarnar a un protagonista inocentón, friki, torpe y algo neurótico? ¿Miren Ibarguren solo sabe interpretar a mujeres gritonas con mucho carácter? La cinta cuenta indudablemente con un buen reparto, pero al querer jugar «a lo seguro» vuelve a colocar a muchas de sus piezas en el mismo tablero cuadriculado y aburrido de siempre. Solo hay una sorpresa grata y destacable: Carlos Librado como el susodicho Lolo. Conocido por la serie Gigantes o El guardián invisible, en esta película interpreta al personaje de forma creíble, rozando la fina línea del cliché de «artista chulo y egocéntrico» y logrando generar una legítima simpatía de cara al espectador a través de su arco de personaje. Pero lo más sorprendente del papel: de todo el reparto de «no andaluces» es el único que logra un acento andaluz que no suena impostado.

La inspectora Garrido (Miren Ibarguren) y sus ayudantes (Canco Rodríguez y Julián Villagrán) intimidan a Sebas. Fuente: Gatrópolis.

En cuanto al director, Carlos Therón, me parece uno de los más hábiles del género actualmente. Sus comedias no pecan de una realización televisiva (en términos de «plano-contraplano» con escasa profundidad de campo y predominancia del plano medio) ni de falta de personalidad. Sin ir más lejos, una secuela pasable como Fuga de Cerebros 2 (Therón, 2011) contaba con un plano secuencia (a lo Scorsese) dentro de una fraternidad universitaria que dejaría boquiabierto a cualquier espectador observador. Lo dejo cuando quiera (Therón, 2018) tenía un ritmo trepidante, fruto de un cuidado montaje, y un humor que a menudo traspasaba la barrera de lo políticamente correcto; el gag de los testículos de los mafiosos rusos o el del poni chocaban diametralmente con las convenciones de la comedia española promedia.

En esta película vuelve a mostrar verdadera pasión y creatividad desde la silla del director, apostando por ciertas referencias visuales tan disparatadas y extravagantes como un «duelo western» (con primerísimos primeros planos de los ojos, al puro estilo Sergio Leone) en mitad del clímax o persecuciones de coches con ritmo, tensión y acción bien rodada, huyendo de clichés actuales del cine de acción como la shaky cam (cámara agitada) o los cortes rápidos en montaje.

Es una lástima que el guion esté construido sobre tantos lugares comunes, porque la dirección de Therón ya suponía un 50% del trabajo hecho. Incluso siendo una película de una empresa como Mediaset, hay lugar para la autoría, puesto que volvemos a ver un plano general de los protagonistas caminando a cámara lenta (como en sus anteriores cintas Es por tu bien y Lo dejo cuando quiera), al más puro estilo Reservoir Dogs (Tarantino, 1992).

«Los Lolos» dan un concierto frente al Puente de Triana. Fuente: Cadena SER.

El problema objetivo de Operación Camarón radica en su tono, que pasa de ser una comedia de enredos con elementos románticos y excusa de trama criminal a un thriller con ciertos golpes de humor. Concretamente, hay un punto de inflexión en la trama: la secuencia del hotel. Es en ese instante cuando culmina cierta subtrama que involucra al miembro más joven de Lolos y cuando estalla la verdadera motivación del protagonista para querer detener a El Fantasma. Es decir, estamos hablando de una escena crucial, el puente del segundo al tercer acto.

Siendo justos, es bastante común que una comedia se adscriba a un tono eminentemente dramático para que su clímax se sienta como un verdadero obstáculo que pone en peligro el final feliz. Ahí están, por ejemplo, Funny People (Apatow, 2009) o la persecución desesperada de Jim Carrey al final de Mentiroso compulsivo (Shadyac,1997).

Sin embargo, la explosión de violencia que adopta, aunque ni por asomo llega a las cotas de películas como las de Enrique Urbizu o Rodrigo Sorogoyen, no deja de sentirse como un choque brutal y notable con respecto al tono anteriormente planteado. Hace dos escenas contemplábamos una cómica escena sobre «la cobra» que sufre el personaje de Natalia de Molina y en ese momento vemos a un menor de edad siendo apaleado con una palanca. Claramente, las piezas del puzle no terminan de encajar…

Luci y Sebas, ¿una pareja imposible? Fuente: filmAnd.

En definitiva, ¿es Operación Camarón «la comedia del verano»? Depende de a quien le preguntes. Si eres fan del flamenco-fusión o te generan simpatía los arquetipos y lugares comunes sobre Andalucía y la cultura cani, esta cinta te funcionará a las mil maravillas. Si buscas una comedia sutil, subversiva con tus expectativas, con diálogos-metralleta a lo Billy Wilder o un humor con muy mala baba, como muchos de los chistes de los Monty Python o de las pelis de Berlanga, esta película no es para ti.

En cualquier caso, gracias a este tipo de propuestas, la gente está regresando a los cines. Y eso, sin importar la película que sea, se agradece dados los duros tiempos por los que está pasando la industria.

Videoclip de una de las canciones de la película, con escenas de la misma.

Valoración de la película

Puntuación: 3 de 5.

Una película que no engaña a nadie. No inventa la rueda en cuanto a comedias: la mayoría de sus actores interpretan papeles en los que ya están «encasillados» y su guion se construye en torno a estereotipos sobre los canis y los andaluces. Pero, aún con todo, la inventiva dirección de Therón y algunas interpretaciones como las de Antonio Dechent y Carlos Librado la hacen más llevadera. Si te gustan las claves propias de las comedias producidas por Mediaset, la disfrutarás enormemente. Si no, difícilmente te resultará «la comedia del verano».

Burlone Brand: la marca del sur

Llega la marca Burlone Brand. Una marca creada por un joven gaditano, Pablo Velázquez. Él llevaba un tiempo pensando en crear el proyecto pero tenía que tener claro el estilo que quería llevar, las prendas, etc. Durante el confinamiento fue cuando comenzó a trabajar en la idea y en octubre fue cuando encaminó todo, es decir, le puso nombre, logo y mucho esfuerzo.

Su nombre, Burlone, procede del italiano y su traducción al español es Guasón/Bufón. Este término se le suele adjudicar a personas que son bromistas, divertidas y alegres. Por eso, es el nombre perfecto para esta marca porque, como dicen ellos mismos a través de su red social de Instagram, la gente del sur se toma la vida con arte y gracia, pero a base de constancia para conseguir sus metas. 

Explicación del nombre. Fuente: Instagram @burlonebrand

La imagen del logo es un mono debido a que representa lo divertido y lo gracioso que es a lo que hace alusión el nombre de la marca. Además, esa mascota está “haciendo un corte de mangas” porque pone de manifiesto todo su significado. 

Logo. Fuente: Instagram @burlonebrand

La marca salió al mercado en el mes de marzo de 2021. Todas sus prendas están enfocadas en el verano y podemos encontrar sudaderas, camisetas o bolsos de playa. Asimismo, la marca está comprometida con el medioambiente porque sus prendas están fabricadas con tejidos orgánicos. Además, un porcentaje de los beneficios van a organizaciones benéficas como la Organización Valvanuz, la cual dona comida a las personas sin hogar en Cádiz. 

Camisetas y sudaderas. Fuente: Instagram @burlonebrand

Estas sudaderas son anunciadas a través de su red social de Instagram (@burlonebrand). En ella, cuelgan publicaciones, pero lo hacen de una forma muy original. Cada vez que suben una imagen, añaden unas pequeñas frases que hacen referencia a varias zonas geográficas de Cádiz con el objetivo de incentivar el turismo en el sur de España. Por ahora están centradas en la provincia gaditana, pero en un futuro buscan expandirse por el territorio andaluz. Algunas de estas frases pueden ser: Nos perdemos por la Sierra de Grazalema este finde? o Quillooo!!! Vamos al Atenas y después relio??

Frase haciendo referencia al municipio de Tarifa. Fuente: Instagram @burlonebrand

Además de ir acompañadas de una frase, dichas imágenes son tomadas en distintos paisajes de la provincia gaditana. Simplemente, a través de ellas se puede observar el bosque o la playa

Foto con el bosque de fondo. Fuente: Instagram @burlonebrand

Si te han gustado sus prendas, los pedidos se pueden realizar a través de mensajes directos a su Instagram (@burlonebrand) o por correo electrónico (burlonebrand@gmail.com). Tiene una página web diseñada pero no está disponible al público aún porque está en proceso de aumentar las prendas en stock para poder servir a los clientes.

Como sabemos, él es del sur y ya tiene ganas de verano. Para esas fechas, se busca hacer una campaña en la que se incluyen sorteos con el objetivo de crecer y desarrollar Burlone Brand con dedicación. 

También en Voz Nueva, a principios del mes de julio te traemos una pequeña entrevista en directo a través de nuestra cuenta de Instagram (@voznueva_) donde podrás conocer más información sobre la marca de Burlone Brand.

El sentimiento de ser andaluz

Ser andaluz, para muchos, va más allá de ser natural de la comunidad autónoma de Andalucía. Las raíces pertenecen a la personas desde el primer instante en el que ponen un pie en el mundo y, en el caso de los habitantes del sur, este sentimiento está ahora más vivo que nunca

«Ser andaluz es como ir en bicicleta: suena saludable, sano y es muy bonito el paisaje, pero el de la moto sufre bastante menos para llegar más lejos», así inicia el humorista Manu Sánchez una de sus columnas más escuchadas en la Cadena SER. El sentimiento andaluz es un tema muy amplio, quizá demasiado. No por ser algo inabarcable, sino porque a lo largo de las ocho provincias hay maneras muy diferentes de ser y sentirse andaluz, así como de manifestarlo.

Anuncio #28FCanalSur #TúEresAndalucía Fuente: Youtube / Canal Sur

La realidad es que lo andaluz conforma una realidad compleja, diversa y en constante evolución. Igual que el acento varía en cuanto se recorren unos pocos kilómetros, a veces la actitud de un almeriense y de un gaditano no se asemeja ni en el blanco de los ojos. Al igual que en el resto del mundo, toda la población andaluza no está cortada por el mismo patrón. Aunque hay algo que sí une a más del 90% de los andaluces: el orgullo de serlo.

Con motivo del día de Andalucía, la Fundación Centro de Estudios Andaluces (CENTRA) ha elaborado un estudio demoscópico en el que analiza algunos temas relacionados con este sentimiento andaluz. El 90,4% afirma sentirse «bastante orgulloso o muy orgulloso» de ser andaluz. ¿Por qué no estarlo? se preguntan muchos. Si lo andaluz es alegría, rebosa gracia y salero. Si lo andaluz es pura fiesta, un domingo en la playa o una semana en el Real de la Feria. Si a ojos de muchos Andalucía es un oasis en el que retirarse a descansar tras unos meses de trabajo, una segunda residencia en la que relajarse y liberarse del estrés acumulado.

Sin embargo, la verdad dista de este paraíso utópico que luce esa «fachada» andaluza. Una fachada que oculta que Andalucía es una de las regiones más pobres, no del sur de España, sino del sur de Europa. Oculta que Andalucía también es tierra de esfuerzo, aunque a muchos les sorprenda, de jornaleros, médicos, docentes y un sinfín de personas que cada día intentan levantar una comunidad muy castigada. Ser andaluz también es levantarse antes que el sol y llevar en las manos cicatrices que narran la historia de toda una vida trabajando, de luchar contracorriente para llegar a fin de mes. «El problema de Andalucía, es que somos pobres» refleja Manu Sánchez en su conversación con Roberto Leal en el programa ‘Escala Sur’.

Manu Sánchez sobre el habla andaluza Fuente: YouTube / Ángel García Domínguez

¿Cuál es, pues, la solución a este entramado de problemas? Tomar partido y renovarse. Darle un giro incluso al himno y «volver a ser lo que fuimos, pero sin dejar de ser lo que somos» como dicen muchos enamorados de Andalucía. Mirar hacia atrás y no olvidar lo que muchos andaluces han luchado para que hoy en día se haya llegado hasta aquí, pero mirar atrás también para coger impulso. Dejar de interpretar el papel que tradicionalmente ha sido asignado al pueblo andaluz y levantarse, no solo literariamente hablando, sino pisando fuerte y reivindicando una identidad muy propia.

El andaluz es de hablar rápido, reír mucho y sentir intensamente, y de esta manera tan intensa se siente identificado con sus orígenes y su identidad. No se puede dejar de ser andaluz, aunque se quiera, y viendo los datos la gran mayoría no quiere dejar de serlo. Como dijo Joaquín Sabina en su discurso al ser nombrado Hijo Predilecto de Andalucía en 2016:

«Bendito veintiocho de febrero, lo dice un hijo pródigo que sabe que aquí no sobra nadie, compañeros, que todo el mundo en esta tierra cabe».

Joaquín Sabina

4 de diciembre de 1977: la manifestación que marcó Andalucía

El día 4 de diciembre de 1977, Andalucía pidió «tierra y libertad» saliendo a la calle para reivindicarse como autonomía. Ese día, andaluces de toda etnia y edad, transmitieron su deseo de lucha para tener una identidad propia y de formar autogobierno tras la represión franquista. Un día importante para muchísimos andaluces, cuya hazaña traería consigo, para el 28 de febrero de 1980, el referéndum que definió la iniciativa autonómica de las ocho provincias
Los malagueños manifestándose con la bandera de la autonomía. Fuente: Público

Las manifestaciones del 4D surgieron en las distintas principales ciudades andaluzas. La bandera blanca y verde hondeaba al viento mientras los griteríos, voceríos y cantares andaluces llenaban las manifestaciones. “Libertad, amnistía y autonomía” era uno de los lemas que alzaban a viva voz.

Por lo que verdaderamente luchaban era por dejar atrás ese mundo agrario durante el régimen para ofrecer a las provincias vías hacia la innovación y el desarrollo de las mismas. Esta conciencia política ardió en el momento en el que se disolvió el Partido Andalucista (PA) tras la pérdida electoral. Sin embargo, estas revueltas y disturbios trajeron consecuencias: las provocaciones por los grupos extremistas y la reacción agresiva de la policía estallaron el caos.

Manifestaciones del 4 de diciembre de 1977 en Andalucía. De fondo suena el pasodoble de Carnaval de Los Piratas, dedicado al 4D en el COAC de 1998. Fuente: YouTube (Pepe Guzmán)

Manuel José García Caparrós, joven malagueño de 19 años, murió asesinado por un disparo policial. Lo que era una marcha memorable se convirtió en una tragedia en Málaga. Así lo asegura Rosa Burgos, investigadora y secretaria judicial para el diario Público: “Manuel José García Caparrós va, el 4 de diciembre del 77, a una manifestación que discurre pacíficamente hasta que llega a la Diputación. Después hay golpes, carreras, provocaciones, detenciones, lesionados, un herido por bala, Miguel Jiménez Ruiz, y un muerto, el propio Manuel José. Durante los dos días siguientes prosiguen los golpes, las carreras, los incendios y hay, incluso, malos tratos dentro en el cuartel de la Policía Armada”. Desde ese día, Caparrós fue un símbolo para los andalucistas que sigue presente a día de hoy.

El entierro de Manuel José García Caparrós. Fuente: Público

Años después, todavía el caso no ha sido resuelto ni ninguna investigación terminó favorablemente para la familia de García Caparrós. Las movilizaciones transcurrieron con la violencia suficiente (pelotas de goma, armas de fuego…) para cobrarse una víctima. Todo esto por el andalucismo. Y a día de hoy, tras la lucha, nos preguntamos: ¿habrá valido la pena?

Los movimientos sociales son núcleos que se han conectado entre sí. Normalmente son transversales y de duración corta o larga. Relativamente el andalucismo se sigue luchando, aunque quedó oculto debido a los movimientos independentistas de Cataluña y País Vasco. Sin embargo, estas manifestaciones están intentando volver a un ámbito institucional. Según el catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad de Jaén, Salvador Cruz Artacho, para el diario La Vanguardia, “la identidad política se ha vinculado con el ámbito socioeconómico representado por la izquierda” y el nacionalismo andaluz quedó desactivado tras conseguir su autonomía. Andalucía no quería una independencia. Tenía otro objetivo: reivindicar su estatuto de autonomía mediante el artículo 151, que le conducía a su unión por vía rápida y de las que solo se habían beneficiado de ello las comunidades de Galicia, País Vasco y Cataluña. El resto de comunidades, incluida Andalucía, debería de esperar unos cinco años en los que se renovarían estatutos y se ampliarían las competencias por el capítulo 143 de la Constitución.

Pintadas tras el funeral de García Caparrós. Fuente: Diario Sur

Estas manifestaciones, no obstante, se siguen celebrando a día de hoy. Andalucía requiere de su representación institucional tal como lo otorgan a Cataluña y en País Vasco en el Congreso debido a los grandes movimientos independentistas. Su motivo de reivindicación aún existirá mientras haya una desigualdad entre el resto de autonomías.

“La identidad política se ha vinculado con el ámbito socioeconómico representado por la izquierda”

Salvador Cruz Artacho, catedrático de Historia Contemporánea

Es por ello que las ocho provincias querían llegar de lleno a las instituciones en plena transición democrática. Plasmar su autogobierno en España y llegarse a reconocer. Aunque el discurso perdure a día de hoy, nunca se llegó a completar. Adelante Andalucía ha sido uno de los partidos que más ha recobrado su mensaje en su agenda política y por el que aún reivindica.

Los andaluces, desde entonces, han pedido el cambio que se proclamó el 4 de diciembre de 1977. Ahora, todavía es incógnita si ese cambio llegará algún día a las instituciones para modificar la percepción de los andaluces desde fuera. O como dice el himno: “volver a ser lo que fuimos…”.

Así suena Andalucía

«Sevilla para nacer, Granada para morir». Así comienza esta letra tan popular en un intenso recorrido por todas las provincias que componen Andalucía. Tierra de poetas, de vida, de gente humilde. Tierra de albero en las fachadas y de patios con rejas; de raíces y de mar. De arte por los cuatro costados y tierra también de música.

Esa es la palabra mágica: música, la que le da sentido a todo lo demás y que se aferra al concepto Andalucía en forma de canción hasta fundirse en una sola entidad.

Disfrazada de alegría o de lamento, convertida en banda sonora de una reunión entre amigos, marcando el compás en el reloj de la cocina o esquivando al sol escondida en el más sutil rincón de un callejón. La música ha sido y es una forma de vida, una manera de entender el mundo. Es la manifestación más pura de las emociones y de los sentimientos, y esto parecen llevarlo aprendido, de forma innata, generaciones y generaciones de andaluces que han sabido encontrarla en cualquier momento y lugar, y se han dejado llevar por ella de una forma tan visceral y humana que casi asusta.

La cantidad de referentes en este mundo es tan tremendamente inabarcable que podría desplegarse en forma de lista desde el primer extremo de Huelva hasta el último de Almería. Su rastro es el que ha contribuido de manera crucial a que pueda extenderse a lo largo de sus ocho provincias una gran variedad de artistas que hoy recogen el testigo y la pintan de diversos colores.

Voces de peso y, a la vez de estilos tan diferentes como las de Niña Pastori, Joaquín Sabina, Pastora Soler o José Mercé son algunos ejemplos que, aunque actuales, se han convertido ya en clásicos andaluces del abanico de posibilidades musicales a las que pueden dar lugar unas raíces comunes. “Unos años de guerra y alegría, un naranjo, y, en el centro, el sentir de Andalucía”, cantaba El Barrio, un grupo que ha utilizado a su tierra como musa para muchos de sus temas y que se ha ganado indiscutiblemente un hueco entre este conjunto de artistas.

Mostrando una cara más pop, pero sin perder un fondo que suena, inevitablemente, a sur, se alzan algunos nombres que forman parte del grueso musical español actual como Pablo López, Vanesa Martín, David Bisbal o Pablo Alborán, quien declaraba su amor incondicional a su tierra al ritmo de “Andalucía, yo te quiero, vida mía”. Manuel Carrasco también le canta a sus raíces llevando por delante “que mi acento es mi ADN, que no es ninguna bandera, que es una canción de cuna que mi madre me cantaba” poniendo en palabras algo tan intangible como es el orgullo de su esencia andaluza. Se les suman cantantes como India Martínez o Antonio José con un carácter muy flamenco y la capacidad de contagiar a cualquier tipo de público de la pasión que encierran sus canciones.

Artistas como El canijo de Jerez o el Kanka, al son de “la que revive a la poesía en cuanto el día se muere” y haciendo referencia, una vez más, a su hogar, añaden un estilo desenfadado que invita a unir la música con la calle, aportando una personalidad única y fresca. María Pelae es otra buena muestra de actitud y desparpajo; pregonera de su cultura en cada una de sus canciones, es capaz de aunar a Lola Flores y a Rosalía en un mismo remix.

Estilos más alternativos también tienen cabida en este heterogéneo conjunto musical. En el lado más Indie – Rock, Andalucía también ha visto nacer a artistas de la talla de Zahara o Supersubmarina.

Lola Índigo, Ana Mena, Dellafuente, La Mala Rodríguez o Beret completan el círculo aportando sonidos muy urbanos y actuales, acercándose, sin dejar de lado su punto andaluz a un estilo más latino o incluso al rap.

Este breve viaje a través del panorama musical andaluz actual, que podría detenerse en infinidad de paradas, pone de manifiesto cómo un arte arrullado en una misma cuna puede descomponerse en multitud de expresiones y formas, siempre anclado, firmemente, a sus orígenes, pero con una mirada hacia el futuro para convertirse así en el sonido de nuestro presente.

Manuel Reiriz: «Tenemos que hablar con libertad sobre salud sexual y emocional»

Hoy tenemos la oportunidad de hablar con Manuel Reiriz Rojas, cibereducador sexual de Adhara: centro comunitario de ETS. En Adhara, atienden a todas las personas que acudan sin importar “su sexo, género, sexualidad o estilo de vida”, tal y como detalla su página web. Además de ofrecer apoyo psicológico y grupos de ayuda mutua, realizan pruebas de detección de ETS como el VIH o el sífilis e imparten formación en sexualidad y salud sexual.
1. ¿Qué es el cibereducador de Adhara? ¿En qué consiste vuestro trabajo?

Yo soy la persona que lleva la Cibereducación. Es un servicio de contacto online que lleva en Adhara a través de WhatsApp y de perfiles en redes sociales (Instagram, Facebook). Cualquier persona de cualquier lugar del mundo puede resolver una duda e incluso de coger cita. En la actualidad, tratamos muchos tipos de enfermedades de transmisión sexual: VIH, sífilis, clamidia, gonorrea y hepatitis C. Dependiendo de la infección, ofrecemos un servicio u otro.

2. ¿Cómo prestáis ayuda en tiempos de Covid-19?

Para adaptarnos a la pandemia, ofrecemos la opción del recibo de pruebas a través de correo ordinario y el envío de material preventivo (como mascarillas y preservativos) para trabajadores sexuales usando la misma vía.

Y, por último, hemos digitalizado toda nuestra formación, la asistencia psicológica y los grupos de apoyo. Todo lo que ofrecemos lo hemos transformado para llevarlo al mundo digital para poder mantener nuestra actividad en caso de que haya nuevos confinamientos y restricciones.

Campaña de Adhara para el envío de pruebas de VIH por correo ordinario durante la pandemia de covid-19. Fuente: canal de YouTube de Adhara
3. Hablemos un poco sobre estadísticas, ¿quiénes acuden más a Adhara en busca de ayuda y consejo? ¿Hombres o mujeres? ¿Chicos jóvenes o personas adultas?

Aunque para la infección de VIH no hay un patrón definido, sí es cierto que acuden a nosotros hombres que tienen sexo con hombres, los inmigrantes y los trabajadores sexuales. A estos últimos les damos preservativos, lubricantes y les ofrecemos pruebas cada tres meses de forma gratuita.

Por suerte, en los últimos años, la incidencia de personas heterosexuales está aumentando de forma significativa debido a que se están rompiendo los estigmas asociados a las ETS. Poco a poco, la población heterosexual se está acercando más a hacerse pruebas.

4. En los últimos años, la educación sexual está viviendo un punto de inflexión gracias a series como Sex Education o charlas en los colegios. ¿Ha incrementado el número de citas para la realización de pruebas de ETS?

Ahora mismo, estamos notando un leve descenso en el número de solicitudes de pruebas debido a la situación. Sin embargo, la incidencia de enfermedades sexuales no ha bajado. El número de positivos de VIH, respecto a las pruebas realizadas, está siendo muy similar al del año pasado.

Además, estos últimos años, hemos notado que ha incrementado el número de solicitudes para charlas formativas en colegios e institutos. La juventud tiene un interés muy alto en una formación sexual más completa, que no solo recuerde que hay que ponerse el condón. Es cierto que sigue habiendo mucha disparidad de ideas en este aspecto, incluso entre los docentes. Pero es un momento bonito para debatir de salud sexual porque el tabú se está rompiendo. Por eso, creemos que estamos empezando el camino hacia la normalización de la sexualidad y la salud sexual.

5. En caso de que el resultado a una prueba de enfermedad de transmisión sexual sea positivo, ¿cuál es el protocolo a seguir?

Si el positivo se debe a una enfermedad de transmisión sexual que no sea VIH, se trata directamente en Adhara de la mano de nuestro equipo y de forma gratuita. Pero si se trata de un positivo en VIH, no lo podemos tratar aquí porque solo se hace en hospitales. Estas personas se derivan directamente a las unidades de infecciosos del Hospital Virgen de la Macarena, Hospital Virgen del Rocío y Hospital Universitario Virgen de Valme.

Perfil oficial de Adhara en Instagram

En cada una de las unidades, hay un trabajador de Adhara. Este trabajador es una persona que tiene VIH y que sirve de apoyo para los nuevos contagiados porque es alguien que lleva 20 o 25 años con la infección y que puede dar ejemplo de buena salud. Esto se conoce como el servicio de pares.

6. Si un menor de edad solicita una prueba, ¿se le realiza sin consentimiento parental previo?

A partir de los 16 años, una persona es libre de hacerse las pruebas que quiera sin el consentimiento de sus padres. Si es menor de 16 años, la persona tiene que acudir a Adhara con su tutor legal y, si da positivo, se le comunicará junto a ambos. Si es mayor de 16, dependerá de él o ella si quiere hablarlo con sus padres. Es una decisión personal como cualquier asunto médico.

7. Como hemos podido ver en su página web, Adhara está muy implicado con las asociaciones de enfermos de VIH, ¿qué tipo de actividades se realizan en esa línea?

Además del servicio de pares, también tenemos un servicio de asesoramiento legal dedicado a resolver los problemas de las personas con VIH y a inmigrantes con VIH. Estos problemas suelen estar relacionados con la discriminación, con la revelación de un estado serológico sin consentimiento o con el acceso a la medicación.

Contamos, además, con grupos de apoyo mutuo organizados por los pares. Los grupos varían en función de las características de las personas: Cafetera para personas heterosexuales y Cubitera para hombres que tienen sexo con hombres. Una vez al mes, se reúnen de forma online para compartir experiencias y para hacer diversas actividades. Sin embargo, estos no son los únicos servicios que prestamos. Tenemos muchos más.

Perfil oficial de Adhara en Instagram

8. ¿Están destinados los grupos de ayuda mutua solamente para las personas con VIH? ¿O también los tenéis para colectivos con otras enfermedades?

Tenemos otro grupo dirigido a las personas que practican el chemsex. Es una nueva tendencia entre los hombres que tienen sexo con hombres en Estados Unidos y Reino Unido, que consiste en consumir ciertas sustancias mientras se practican relaciones sexuales.

Estas drogas permiten mantener relaciones durante mucho tiempo con drogas adictivas. Además, de favorecer la drogadicción, el chemsex aumenta la exposición a enfermedades sexuales sin control. Conocemos la existencia de drogas anestésicas que hasta hacen que la persona no se dé cuenta cuando sangra, por ejemplo. Lo cierto es que gran parte de las infecciones de enfermedades de transmisión sexual con las que trabajamos actualmente se deben a esta práctica.

En la sede, nuestro equipo de psicólogos trabaja con todas esas personas que tienen un problema con el chemsex. Les prestamos ayuda para que puedan volver a una situación más sana. Quizás puede sonar un poco extraño, pero el chemsex es uno de los grandes problemas a los que nos enfrentamos actualmente.

Perfil oficial de Adhara en Instagram

10. ¿Cómo creéis que se puede crear conciencia en la población sobre las enfermedades sexuales?

Nosotros apelamos siempre a la educación y formación sexual. Vivimos en una época en la que la información está en todas partes pero muy poca información es veraz. Si los chicos jóvenes conocieran los datos, se darían cuenta de la alta probabilidad que tienen de contraer una enfermedad de transmisión sexual.

Debemos romper esos estigmas y tabúes y ver que es algo que nos afecta, sobre todo si somos jóvenes. Debemos chequearnos porque las ETS no tienen síntomas. La educación y la formación junto a las pruebas periódicas son la clave para concienciar a la población. Sobre todo, tenemos que hablar con libertad sobre sexo o sobre salud sexual y emocional.

El andalucismo no es un nacionalismo de derechas

Recientemente, con el ascenso de los grupos nacionalistas de ultraderecha por toda Europa, el término nacionalismo está más presente que nunca entre la sociedad. Tendemos a pensar que este concepto está vinculado a una ideología política de derechas, pero no siempre pertenece a esta
Caricatura sobre el nacionalismo. Fuente: José Ibarrola

El nacionalismo surge en Europa a partir de la palabra nación en medio de la revolución industrial, burguesa y liberal. Es una ideología y movimiento sociopolítico basado en el sentimiento a la nación por parte de una comunidad que comparten idea, cultura, religión e historia. En España, encontramos varios tipos de nacionalismo, uno de ellos es el español, que apela a la unidad territorial y se suele vincular a partidos políticos de ultraderecha como Vox, que ha tenido un crecimiento notable en los últimos resultados electorales. Cabe destacar la irrupción tan denotativa en las elecciones catalanas, siendo el partido de derechas con más escrutinio conseguido.

Al ser España un país descentralizado, organizado en comunidades autónomas, ha derivado en nacionalismos periféricos como es el caso del andaluz. Aunque el nacionalismo andaluz no nace en 1978 cuando se le concede la autonomía a la comunidad a través de la Constitución española.

Primeros pasos del nacionalismo andaluz

Hay que remontarse al año 1912, cuando el periódico El liberal sevillano abre la puerta a a una nueva necesidad para el pueblo andaluz bajo la idea política-regional de Andalucía. Este hecho hará que se convoque una asamblea para el 10 de mayo de 1913 en el ateneo de Sevilla conocida como los juegos forales. Esta reunión fue presidida por un catalán, Francisco Cambó, que tenía como objetivo que el poder político andaluz ayudase al catalán. Para Cambó era una estrategia que ayudaría a Cataluña, pero para Andalucía fue un paso importante ya que se le inculca la idea de la independencia productiva del norte de España. En esta asamblea estarían presentes algunos de los padres del idealismo andaluz como Blas Infante, Jose María Izquierdo o Alejandro Guaichot.

A partir de esta asamblea en el Ateneo, se creará la revista Bética, cuyo principal objetivo y finalidad es difundir las nuevas ideas regionalista de Andalucía.

Abandonamos la provincia de Sevilla y viajamos hacia la malagueña, concretamente a Ronda, donde dará lugar el I Congreso Internacional de Economistas Fisiócratas lugar en el que Blas Infante interviene por primera vez públicamente. Hay que destacar la figura del malagueño, ya que en 1915 se convertirá en el líder del movimiento nacionalista andaluz gracias a la publicación de El ideal andaluz. Donde se llama al pueblo andaluz, así como a sus intelectuales al intento de recuperar la identidad de su cultura y pasar de ser una clase temporera a una propietaria.

Blas Infante en el centro de la foto en el I Congreso Internacional de Economistas Fisiócratas, Ronda. Fuente: EFE

El andalucismo de estos años quería acabar con la pobreza de la clase trabajadora andaluza que constituía las 3/4 partes de la sociedad como agricultores o pequeños arrendatarios en el área rural. En los aledaños urbanos, la desigualdad y pobreza se mantendrá, pues los andaluces realizaban trabajos esporádicos y marginales. Esta estructura social desigualitaria no solo se dará en el interior de Andalucía, sino que las desigualdades con respecto al territorio nacional también serán brutales.

Con la dictadura de Primo de Rivera iniciada en 1923, todas las pretensiones nacionalistas andaluzas serán prohibidas, por lo tanto el movimiento perderá fuerza. Pero, la proclamación de la II República abrirá un rayo de esperanza, ya que Blas Infante, que forma parte de varios grupos de izquierda, expresará su idea de formar el Estado Libre de Andalucía dentro de la organización territorial federal de la República. Cuando todo iba en su cauce, se elabora el estatuto de autonomía andaluz con la intención de ser aprobado en junio de 1936.

Entre el 17 y el 18 de julio comienza la guerra civil española que enfrentará a los nacionalistas (españoles) con los rojos. Asesinando los falangistas (nacionalistas) en agosto, en la carretera de Sevilla a Carmona, al padre de la patria andaluza, Blas Infante. En esa madrugada de verano, el malagueño gritó dos veces antes de ser abatido: «¡Viva Andalucía libre!«

Blas Infante. Fuente: EcuRed

Con la instauración del Régimen franquista en 1939, la represión al andalucismo será obvia, ya que chocará con sus planes centralistas y nacionalistas españoles. Esta dictadura será caracterizada por el conservadurismo, mientras que las pretensiones nacionalistas periféricas como la andaluza serán principalmente progresistas. La represión franquista en Andalucía será dura y al mismo tiempo invisible, ya que se saqueó, andaluces que murieron en las cárceles de hambre y no había apenas posibilidad de salvarlos.

En los años 60, España vive una apertura hace el exterior, relajándose los efectos más crueles de la dictadura franquista, permitiéndose el nacionalismo andaluz a través de grupos intelectuales retomar el ideario de Blas Infante. Pero marcaremos el año 1975 como clave en el auge del nacionalismo andaluz, no solo le influyó la muerte del dictador Francisco Franco, sino que muchas familias andaluzas debido a la emigración a Europa y otros territorios españoles, se dieron cuentan de las condiciones tan precarias, económicamente hablando, de Andalucía frente a la posibilidad de riqueza que tenía su tierra. También en este viaje tomaron conciencia social y cultural de Andalucía.

Tras ser proclamada la Constitución española de 1978, Andalucía podrá optar a su autonomía por la vía rápida, aprobando el referéndum el 28 de Febrero de 1980.

Fuente: Los carteles del 28F. Junta de Andalucía

Actualmente nos encontramos con muchas organizaciones andaluzas que tienen como nexo común, el ideario del padre de la patria andaluza, Blas Infante. También otro elemento común es la ideología de izquierdas frente a la de derechas que acostumbra tener cualquier nacionalismo. Estas organizaciones tienen como fin desde conseguir la autonomía de la nación andaluza, federalismo o incluso su independencia.

Representación política
  • Colación Andalucista (CA)

La Coalición Andalucista formada principalmente por el partido andalucista y el partido socialista de Andalucía, tiene como objetivo conseguir un proceso de autodeterminación de los andaluces y de Andalucía. A pesar de estar formado por un grupo bastante amplio de partidos andalucistas, la falta de claridad les ha llevado a no poder tener representación política en el parlamento andaluz.

  • Candidatura Unitaria de Trabajadores (CUT)

La Candidatura Unitaria de Trabajadores fue el que dio pie a la formación del grupo Izquierda Unida. Se declara como nacionalista andaluz y principalmente representa a grupos rurales y de algunas zonas urbanas. Su ideología es sindicalista, de izquierdas y comunista. Estuvo vinculado a izquierda unida hasta 2015 y tiene representación parlamentaria en Andalucía dentro de podemos.

  • Adelante Andalucía

Pero sin duda, la representación política que con mayor fuerza ha irrumpido en el parlamento andaluz ha sido Adelante Andalucía. Un grupo antifascista, anticapitalista, de izquierdas y nacionalista andaluz. Es uno de los partidos con más fuerza dentro del nacionalismo andaluz, aunque fue noticia hasta hace bastante poco debido a la desvinculación de su líder Teresa Rodríguez y la expulsión del grupo político Podemos.

Manifestación por los derechos de los andaluces. Fuente: Las Repúblicas.
Símbolos

Como cualquier nacionalismo, el andaluz, también tiene su bandera, creada por el partido socialista andaluz. Esta bandera es conocida como la arbonaida nacionalista de color blanca y verde, pero con una estrella roja en representación de la ideología socialista. Algunos grupos intentaron que la estrella usada fuese la tartésica, pero no cuajó. Además de la bandera, los grupos nacionalistas usan el lema nacionalista creado por Blas Infante:

«Andalucía por sí, los pueblos y la Humanidad»

Blas Infante

Esta bandera suele ser utilizada en manifestaciones que luchan por los derechos humanos de los andaluces y andaluzas. Entendiendo andaluces y andaluzas por personas que no solo hayan nacido en la comunidad autónoma, sino todo aquella persona que haga de Andalucía.

Algunos símbolos del andalucismo. Fuente: @Andalucización

A pesar del gran recorrido histórico del nacionalismo andaluz y el intento de grupos nacionalistas de crear un sentimiento común nacionalista andaluz, no está consolidado. La representación de estos grupos en el parlamento andaluz es escasa y mínima, y los representantes corresponden a partidos políticos consolidados a nivel nacional. Tampoco Andalucía cuenta, a nivel nacional, con un partido fuerte en el congreso de los diputados. Por lo que el ideario que costó la vida a Blas Infante sobre su Andalucía, no ha alcanzado el éxito que mereciese tener. El pueblo andaluz sigue siendo muchas veces el gran olvidado de la política española, por lo que un partido nacionalista consolidado pondría sobre el territorio nacional los deseos e intereses de los andaluces y andaluzas.

El acento andaluz en el carnaval de Cádiz

El mes de febrero en Andalucía está marcado por varios acontecimientos como el Carnaval de Cádiz y el Día de Andalucía. A continuación, se recogen las coplas más reseñables cantadas en el Gran Teatro Falla sobre el sentimiento y acento andaluz
1- Yo presumo de ser andaluz de Los soldaditos (1989)

La comparsa Los soldaditos cuyos autores son Paco Villegas Mejías y José Luis Bustelo en 1989 (3º premio). El pasodoble Yo presumo de ser andaluz explica cómo se habla en Andalucía y porque hay que sentirse orgulloso de pertenecer a esta comunidad autónoma.

Fuente: Angel Justo
2- Dios te hizo de La Botica (1997)

La comparsa de Tino Tovar llamada La Botica en 1997 (3º premio). Dios te hizo es un pasodoble donde se enumeran las bellezas y singularidades de Andalucía a lo largo de sus ocho provincias. Un recorrido por el pasado y el presente de esta tierra para ensalzar su importancia.

Fuente: Friky Delascoplas
3- Era un cuatro de diciembre de Los piratas (1998)

La comparsa de Martínez Ares, Los piratas de 1998 (1º premio). El pasodoble Era un cuatro de diciembre explica los altercados que tuvieron lugar el 4 de diciembre de 1998 en Andalucía para luchar por su autonomía. “Era un cuatro de diciembre cuando tomaron las calles” así comienza este pasodoble para enmarcar una fecha histórica para esta comunidad autónoma.  

Fuente: carnavalsur
4- Aunque diga Blas Infante de Los Yesterday (1999)

La comparsa de Juan Carlos Aragón, Los Yesterday de 1999 (1º premio). El pasodoble Aunque diga Blas Infante es una modificación del himno original creado por Blas Infante para reivindicar la singularidad y la belleza de esta tierra de una manera muy particular.

Fuente: NacionAndaluza
5- Será que el alma de Flamenkito Apaleao (2000)

La comparsa de Juan Carlos Aragón llamada Flamenkito Apaleao del 2000. Será que el alma es un pasodoble donde se explica cómo es crecer y vivir en Andalucía, donde todo se vive de una manera diferente al resto de España.

Fuente: Carnaval por un tubo
6- Como todos sabrán de No somos nadie (2004)

La chirigota No somos nadie de Manuel Cornejo Aragón en el año 2004 (2º premio). Como todos sabrán es un pasodoble donde se reivindica la solidaridad de los andaluces y el sentimiento de los inmigrantes que también aman Andalucía casi tanto como el gran Blas Infante.

Fuente: MrJoshuaaaaaa
7- Soy la baja Andalucía de Los trasnochadores (2009)

Los trasnochadores, comparsa de Jesús Bienvenido en 2009 (3º premio). Soy la baja Andalucía es un pasodoble donde se reivindica el acento andaluz, ya que es lo que más identifica al pueblo andaluz. Una tierra de campo y mar, pero con mucha historia y cultura.

Fuente: Simplemente Cádiz
8- Esta la canto en gaditano de La Sereníssima (2012)

La comparsa del reconocido Juan Carlos Aragón La Sereníssima del año 2012 (2º premio). Esta la canto en gaditano argumenta como es la situación laboral en Andalucía con respecto a otras comunidades. Esta copla hace alusión a una entrevista de Cayetano Martínez Irujo donde hizo una comparación entre Andalucía y Salamanca con respecto a la disponibilidad para trabajar.

Fuente: Carnavalsur
9- Andaluces levantaos de Los hinchapelotas (2012)

Los hinchapelotas es una chirigota de José Antonio Vera Luque en 2012. Salta al campo Andalucía es un pasodoble para reivindicar la libertad de este lugar y la importancia que se merece fuera de sus fronteras. Un intento de justificación de una posible revolución por parte del pueblo andaluz.

Fuente: Carnavaleros
10- Voy a cantarte una copla de Los invencibles (2016)

Los invencibles, comparsa de Antonio Martín de 2016 (2º premio). Voy a cantarte una copla hace alusión a la poca importancia que tiene Andalucía fuera de sus fronteras, en segundo plano. Los campos llenos de trigo y los grandes poetas que han nacido bajo el suelo andaluz son insignificantes para el resto. “Que aquí nada está cambiando, que te siguen puteando” argumentan los miembros de esta comparsa.

Fuente: Al compás gaditano
11- Luces y sombras de Andalucía de Los equilibristas (2017)

La comparsa Los equilibristas de Ángel Subiela Gómez en el año 2017. El pasodoble Luces y sombras de Andalucía explica los puntos positivos y negativos de Andalucía: en un recorrido por las ocho provincias donde señalan los diferentes aspectos que caracterizan este lugar. Pero, a pesar de todo, hay que querer a esta comunidad autónoma.

Fuente: Carnaval por un tubo
12- Pobrecito castellano de El perro andalú (2018)

El perro andalú, comparsa de Martínez Ares en 2018. El pasodoble Pobrecito castellano hace una crítica a todas aquellas personas que afirman que no entienden el acento andaluz por lo que se hace un pequeño recorrido histórico por las diferentes culturas que han pasado por esta tierra. “No hablamos malamente, hablamos mucho más tiempo” afirma esta agrupación.

Fuente: carnavalsur
13- Por tus cielos, Andalucía de Los encaidenaos (2019)

La comparsa de Kike Remolino llamada Los encaidenaos del año 2019 (3º premio). El pasodoble Por tus cielos, Andalucía detalla todas las peculiaridades que tiene el suelo andaluz (tierras, autores, filosofía, etc). Un canto por todas las personas que conforman Andalucía para que permanezca unida.

Fuente: Carnaval con Letra
14- Seguramente esta letra de Daddy cadi (2019)

Daddy cadi es el nombre de la chirigota de Sevilla cuyo autor es Juan Carlos Fillol Rodríguez del año 2019 (2º premio). El pasodoble Seguramente esta letra hace alusión a la diferencia de los andaluces con el resto y al último cambio de gobierno con la llegada de la derecha tras 40 años de socialismo en el Parlamento de Andalucía.

Fuente: Al Son del Carnaval

Andalucismo político

Hablar de andalucismo es abordar un tema con muchos matices, todo ello relacionado con el sentimiento de amor hacia lo que tiene que ver con Andalucía. En política, esto se corresponde con los movimientos y corrientes que reivindican la necesidad de que el pueblo andaluz llegue al autogobierno

La bandera blanca y verde vuelve tras siglos de guerra. Así comienza el himno de una comunidad autónoma con mucha historia y con una identidad propia. Pensar en Andalucía lleva a imaginar fiesta, gente en la calle y felicidad irradiada por los cuatro costados. Sin embargo, la «cara B» de este jolgorio con acento trae consigo crisis y reivindicaciones que tienen lugar en una región que siempre ha estado muy castigada.

El andalucismo como movimiento nacionalista nace durante las tres primeras décadas del siglo XX, bebiendo del regionalismo andaluz de finales del siglo XIX. La fusión del federalismo derivado de las ideas de la efímera I República, las reivindicaciones contra el centralismo y la romántica idea del sentimiento andaluz sirvieron de ingredientes para desatar una ideología que poco a poco iba asentándose desde los movimientos cantonalistas.

La figura de Blas Infante en el andalucismo

Con Alfonso XIII en el trono a principios del siglo pasado se produjeron algunas de las primeras muestras significativas de regionalismo andaluz. Prueba de ello es la publicación del Ideal Andaluz de Blas Infante, en el que se proponía la creación de una Mancomunidad andaluza para la gestión provincial administrativa, así como los problemas que debía de afrontar Andalucía para su renacimiento, ya que con él vendría la regeneración de España .

Placa de Blas Infante
Fuente: Wikipedia

«Mi nacionalismo, antes que andaluz, es humano. Creo que, por el nacimiento, la naturaleza señala a los soldados de la Vida el lugar en donde han de luchar por ella. Yo quiero trabajar por la Causa del espíritu en Andalucía porque en ella nací».


En 1918 en la celebración de la Asamblea de Ronda se establecen los que serían la bandera y el escudo de la comunidad, las «insignias de Andalucía» como un paso más para acercarse a la deseada autonomía. Sin embargo, esta tardaría algunos años más en llegar, a pesar de que ya en 1933 se aprobaba en la Asamblea de Córdoba el Anteproyecto de Bases para el Estatuto de Autonomía de Andalucía. En este mismo año se establece el tercer símbolo por excelencia de Andalucía: el himno.

El año 1936 es un año de cambios para España, no iba a ser menos para el considerado «Padre de la patria andaluza». Tras el golpe militar del 18 de julio, Blas Infante fue detenido y fusilado en la carretera de Sevilla a Carmona junto a otros cinco hombres.

La muerte de Blas Infante no supuso el fin del movimiento andalucista, aunque su actividad se vio mermada a causa de la Guerra Civil y la posterior dictadura franquista. A raíz de los movimientos migratorios de andaluces fuera de la región estos empezaron a cuestionarse los problemas económicos que esta sufría y la identidad cultural que defendían allá donde fuesen.

Retos del andalucismo del siglo XXI

Andalucía es consciente de su empobrecimiento económico. Una comunidad con un gran potencial en diferentes ámbitos, pero que en realidad tiene unos índices de pobreza y subdesarrollo por encima de la media. Entonces, ¿lamentarse eternamente es lo único que puede hacer el andalucismo? Ni mucho menos.

El movimiento andalucista tiene por objetivo forjar una identidad andaluza a través del desarrollo de la comunidad autónoma. No se ha de limitar el andalucismo a la defensa de la cultura andalusí. Aunque sea Al-Ándalus el origen de la actual Andalucía, muchos otros pueblos, razas y civilizaciones son los que han aportado y hecho de lo andaluz lo que es hoy en día.

Pintada reivindicativa Fuente: Pinterest

El andalucismo ha de saber mirar por la región y por la amplia gama de posibilidades que esta tiene. La solución no está en evitar los problemas y continuar emigrando fuera para conseguir un futuro laboral y prosperidad, sino que hay que encontrar la solución para que el bienestar del pueblo andaluz sea la principal prioridad. Resurgir como un ave fénix para «volver a ser lo que fuimos».

La cuestión no es generar un enfrentamiento entre las diferentes provincias, los diferentes movimientos o partidos que luchan por el andalucismo, sino generar un ambiente de unión y cohesión para la defensa colectiva de las diferentes demandas de la población. Repitiendo las palabras de Blas Infante, «nuestro nacionalismo, antes que andaluz, es humano».

El 28-F, una historia de tragedia y orgullo

Andalucía conmemora cada año su reconocimiento como autonomía dentro del mapa de España. El camino hasta el 28 de febrero de 1980 es una historia de tragedia y orgullo que jamás caerá en el olvido

El mes de febrero cuela en las aulas de toda Andalucía el pan con aceite, las pajitas con la verde y blanca, el himno de Blas Infante y, sobre todo, orgullo. Orgullo porque hoy en día, se saca la bandera gracias a la lucha de los más mayores hace más de 40 años. Los andaluces marcan en rojo el día 28 de febrero como el día grande de su tierra. Tal día de celebración perdura a través de las generaciones, pero es importante saber la raíz de lo conmemorado. ¿Por qué el 28-F? ¿Qué ocurrió aquel dia para que en la actualidad sigamos recordándolo? Responder a estas cuestiones nos lleva hasta el 1977. Damos un repaso al antes y al después del 28 de febrero de 1980.

La Andalucía preautonómica

Toda historia tiene un comienzo. La de la autonomía andaluza lo tuvo el 4 de diciembre de 1977, un día que permanece en la memoría de muchos andaluces. Tras una larga dictadura, Andalucía quería «volver a ser lo que fue». En plena Transición, miles de personas se echaron a las calles con la bandera verde y blanca para reclamar su reconocimiento como autonomía. Se estima que alrededor de un millón y medio de personas acudieron a la llamada de la Asamblea de Parlamentarios en las capitales de las provincias. La manifestación era pacífica hasta que en Málaga, un disparo de la policía acabó con la vida de un joven de 16 años. Su nombre, Manuel José García Caparrós. Hoy, es símbolo de aquella lucha. El 28-F no se entendería sin aquel fatídico, pero fundamental día para el devenir de Andalucía.

Manifestación del 4 de diciembre de 1977. Fuente: IES El Arenal
Ataúd de García Caparrós. Fuente. Público

Apenas un mes después, el 7 de enero de 1978, la Asamblea de Parlamentarios andaluces aprueba un proyecto de Decreto para regular el régimen preautonómico. El 27 de abril, el Real Decreto Ley 11/1978 concede la preautonomía a Andalucía. Un mes más tarde, Plácido Fernández Viagas es investido presidente de la Junta preautonómica. Ya en 1979, los resultados de las elecciones generales hacen posible la constitución de la Junta de Andalucía, con Rafael Escuredo elegido presidente. La nueva Junta decide acogerse a la vía del artículo 151 de la Constitución Española para lograr la autonomía. Más del 95% de los ayuntamientos y las diputaciones provinciales respaldaron la iniciativa. Una comisión de nueve representantes de los partidos parlamentarios aprobaron un anteproyecto de Estatuto en Carmona.

El 28-F y el Estatuto de Autonomía

El día clave, ese que celebramos cada año, fue el 28 de febrero de 1980. El pueblo se pronunció sobre el proyecto de autonomía y un futuro Estatuto. El gran apoyo obtenido generó un extenso debate en las Cortes Generales pese a que en Almería no se alcanzó el techo legal. Se modificó la Ley de Referéndum para que la provincia almeriense también formase parte del proceso. Otra modificación, la de la Ley Orgánica de modalidades de referéndum, desbloqueó el paso de Andalucía a autonomía, incluyendo a Almería, cuya no ratificación fuese sustituida por las Cortes previa petición de los diputados y senadores de la provincia.

Celebraciones tras el referéndum del 28-F. Fuente: El Correo Web

Un año después del referéndum, la Asamblea de parlamentarios aprueba el proyecto del «Estatuto de Carmona», tomando como referencia el borrador de 1979. En octubre, se sometió a referéndum y encontró el apoyo de la ciudadanía. Solo quedaba su ratificación por parte del Congreso, el Senado y, por último, del rey Juan Carlos I.

Las primeras elecciones parlamentarias

El 23 de mayo de 1982 se celebraron, al fin, los primeros comicios al Parlamento andaluz. Con un 60,42% de participación, el PSOE logró la mayoría absoluta, quedando proclamado presidente electo Rafael Escuredo. El 21 de junio, se constituye por primera vez el Parlamento en el Real Alcázar de Sevilla. Aquellos 109 diputados fueron los encargados durante los siguientes dos años de la transferencia de competencias que en la actualidad posee la Junta. Quedó así culminado el largo camino para ser una autonomía reconocida. Debates, referéndum, gritos en las calles e incluso una vida inocente fue el coste de hacerse un hueco en el mapa de España. Así se forjó la autonomía que conocemos hoy, y por todas esas personas, cada 28 de febrero se saca la bandera blanca y verde.