Todos y todas hemos escuchado hablar del condón masculino, pero del femenino ¿cuánto hemos oído? Solo un 1% de las mujeres utilizan el condón femenino.
Desde el equipo de Voz Nueva se ha preguntado a muchas mujeres sobre el condón femenino. Muchas de ellas admitían no saber mucho o nada y que nunca se han planteado utilizarlo. Todas estaban seguras de que se trataba de un preservativo que se parece al del hombre y que se introduce en el interior de la vagina. Algunas de las afirmaciones que también mencionaban muchas de ellas eran: “Tiene la misma función que la del hombre”, “Puedes tenerlo unas horas introducido sin tener relaciones sexuales”, “Está hecho de silicona o de látex”, “Es más grande que el del hombre”, “Tiene un porcentaje de fallo menor”, “Para colocarlo tienes que ir a un especialista” o “Es más caro”.
No solo se le preguntó a las mujeres, sino también a los hombres. Algunos no sabían que existían los condones femeninos, otros sabían que este cubría las paredes vaginales, pero no como se colocaba. También hay otros afirman que son más eficaces que el condón masculino, más fácil de colocar y también que protegía de las ETS.
¿Es todo ello cierto? ¿Estamos bien informados/as? Según MedlinePlus, servicio de información en línea provisto, y Mayo Clinic el condón femenino, también llamado preservativo interno, es un dispositivo utilizado para el control natal. Es decir, se emplea para que la persona no se quede embarazada. Además, se pueden usar para mantener relaciones sexuales por vía anal. Sin embargo, esta no es su única función, sino que también gracias a este podemos evitar infecciones de transmisión sexual, como el VIH.
Sí, el condón femenino es más grande que el condón masculino. Se trata de una bolsa suave, holgada y fuerte con un anillo en cada extremo. El anillo cerrado se ubica en el interior de la vagina doblándolo e introduciéndolo en la vagina como un tampón y se ajusta sobre el cuello uterino cubriéndolo con el material de goma, siempre ayudándonos con el dedo para asegurarnos que llega hasta el cuello del útero. El anillo que está abierto permanece por fuera de la vagina cubriendo la vulva. Para retirarlo se debe girar el anillo exterior enrollando el preservativo y tirar suavemente para extraerlo de la vagina.
Existían dos tipos de preservativos internos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos en los EE. UU.: El FC1 y el FC2. ¿Por qué decimos “existían”? Porque el preservativo femenino FC1, fabricado en un plástico llamado poliuretano, ya no se produce.
El preservativo femenino FC2 está hecho de látex sintético, siendo seguro para aquellas personas alérgicas al látex natural. No tiene hormonas y tiene un lubricante a base de silicona.
Según un estudio en el que participó el Grupo Español de Diabetes y Embarazo de la Sociedad Española de Diabetes y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia, el condón femenino tiene algunas ventajas con respecto al del hombre. El preservativo interno puede colocarse hasta una o incluso ocho horas antes del acto sexual, ofrece protección de los genitales externos (evitando mayor número de infecciones) y al tratase de un método anticonceptivo controlado completamente por la mujer, aumentar la seguridad de esta.
Por último, conforme Mayo Clinic este tiene la ventaja de que no requiere de la colaboración de la pareja ni que el pene esté erecto. Además, como menciona la revista de salud y bienestar Webconsultas, no es preciso retirarlo inmediatamente después de la eyaculación.
Sin embargo, el riesgo que ofrece es que el preservativo interno no protegerá si se rompe, si se sale de la vagina, si el pene pasa entre la vagina y la superficie externa del preservativo o si el anillo externo del condón durante el coito se empuja dentro de la vagina. Este preservativo incluso puede llegar a producir incomodidad durante la colocación, sensación de ardor, picazón o sarpullido.
¿Cuál es más efectivo? ¿El masculino o el femenino?
Está comprobado que ninguno de los dos preservativos son 100% efectivos. Según Medline Plus el preservativo interno tiene una efectividad de entre el 75% y el 82% en el uso habitual. Pero, de acuerdo a News Medical, el 21% de mujeres que lo usaron han llegado a quedarse embarazadas. Este es un porcentaje alto en comparación con el masculino pues tan solo el 14 % de mujeres han llegado a quedarse embarazadas usándolo.
¿Por qué es más efectivo el condón masculino? News Medical menciona que esto se debe probablemente porque es más fácil de colocar el preservativo en el pene erecto que insertar el condón femenino en la vagina y asegurarse de que el anillo interno queda pegado al cuello uterino.
Otra de las dudas que tienen las personas con respecto a este preservativo es si tiene un precio más elevado que el condón masculino o no. Suelen costar entre 1,5 o 2 euros la unidad, pero también se venden en cajas de unos tres preservativos o más y cuesta en torno a 9 euros. Estos son más caros debido a que tanto el material como la fabricación son más costosos.
Asimismo, nos cuestionamos dónde podríamos llegar a conseguir estos preservativos. Si observamos bien, en los mercados sólo encontramos preservativos masculinos, pero en ningún lugar se encuentra el femenino.
Fuente: Cacof Fuente: clínica salud y vida
Los condones femeninos pueden encontrarse en la mayoría de las farmacias, en clínicas para infecciones de transmisión sexual y en clínicas de planificación familiar sin necesidad de disponer una receta médica.