La pandemia y sus “pormenores”

La declaración de pandemia por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y, por consiguiente, la proclamación del Estado de Alarma en todo el territorio nacional español el 20 de marzo de 2020, supuso el cese de toda actividad comercial más allá de los establecimientos destinados a proveer productos de primera necesidad. Pero ¿qué hay de aquellas personas que no prestaban servicios esenciales o hacían trabajos esporádicos?

Fuente: La Verdad

Esas personas sin una nómina fija a final de mes cuyos ingresos dependían de los trabajos “sueltos” —como arreglar una lavadora o pintar una vivienda— y todos aquellos negocios que se vieron obligados a cerrar sus puertas han resultado gravemente afectados por la situación actual: ha aumentado el número de personas en situación de desempleo, la desigualdad económica y la pobreza, entre otras. A ello se e le une una disminución de ingresos y de ahorro por parte de la población española.

Como forma de ayuda hacia los afectados y de freno a esta desigualdad social que se estaba creando, el gobierno reactivó el Ingreso Mínimo Vital (IMV) y lanzó la política de los ERTEs (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) para proteger al trabajador ya que prohíbe el despido en seis meses. Aunque, contempla excepciones en caso de que la empresa esté en riesgo de concurso de acreedores o se haga un despido disciplinario.

Por tanto, no nos encontramos con una protección total a las personas más vulnerables. Y más si tenemos en cuenta el gran atasco que hay por parte de las administraciones a la hora de aprobar las solicitudes y resolver los casos para que las empresas puedan cobrar las ayudas y pagar a su vez a los acreedores y a los trabajadores.

Así ha ido cambiando la cifra de parados y ocupados en España:

Muchos trabajadores aún no han cobrado el paro o el ERTE debido a la gran aglomeración que se ha formado por el exceso de peticiones pero, en otros casos, es fruto de errores en el proceso de inscripción. Por ello, es importante comprobar que no haya ninguna diligencia en la tramitación de la prestación a través de la página web del SEPE, donde hallamos una guía para poder localizar los principales errores cometidos durante el proceso y solventarlos posteriormente; siendo el código de cotización de cuenta el error más frecuente y que se solventa remitiendo nuevamente el Excel corregido.

Fuente: Susana Vera / Bolsomania

Esta pandemia ha traído consigo una gran crisis económica a nivel global, siendo España uno de los países europeos más afectados económica y socialmente por el número de casos de infectados. Acentuando todo esto, una extensión de la pobreza que ya había comenzado a dar la cara durante la crisis de 2008 pero que, en la actualidad, se hace mucho más tangible al encontrarnos con datos estadísticos realizados por el INE (Instituto Nacional de Estadística) que, a pesar de no mostrar datos exactos, indican que hay alrededor de 30.000 personas ¨sintecho¨.

Sin embargo, no todos los cambios producidos por este virus son negativos: las actividades de voluntariado se han visto en auge. Más de cinco millones de personas este año han realizado alguna tarea de índole social siendo cerca de dos millones de personas no habituales en la colaboración con las ONGs u otros centros de ayuda, es decir, se ha duplicando la tasa habitual gracias a esta explosión de solidaridad y altruismo por parte de los españoles.