¿Sabes cómo mantener las uñas saludables y a la vez bonitas?

Contempla tus uñas con especial detalle. Deberían estar fuertes y tener un aspecto saludable. O por lo contrario, ¿percibes que presentan surcos, hendiduras o zonas que tienen color o forma inusual? Muchas afecciones de las uñas se pueden llegar a evitar con un cuidado apropiado.  Este cuidado incluye no mordértelas, por ello, te traemos algunos trucos para evitar este mal hábito.
Uñas naturales, sanas y largas. Fuente: Pinterest: Dulce Laureos

Asiduamente existen numerosos factores que pueden afectar a nuestras uñas. Estos pueden ser factores internos y externos, que debilitan, manchan o hacen que las uñas se vuelvan quebradizas y frágiles. El cuidado de nuestras uñas es de suma importancia, sobre todo si nos realizamos la manicura normalmente y queremos que las uñas crezcan más fuertes y sanas. Por ello, te ofrecemos algunos consejos para evitar las uñas frágiles y debilitadas y, así, lucir unas uñas saludables.

Seca y limpia tus uñas con frecuencia.

Esto evita que se produzcan bacterias debajo de las uñas. El contacto reiterado o prolongado con el agua puede causar que se partan las uñas.

Realiza una buena higiene de las uñas.

Haz uso de unas tijeras de manicura afiladas o un cortaúñas. Córtate las uñas en línea recta, para luego redondear las puntas en una curva sutil. También, utiliza un algodón nuevo cada vez que apliques quitaesmalte.

Hidrátalas continuamente.

Cuando utilices crema hidratante para manos, aplícala también en las uñas y las cutículas. Sin embargo, el aceite de oliva también es un producto bastante adecuado para la hidratación de nuestras uñas. Basta con remojarlas en aceite durante 10 minutos un par de días a la semana. Otros dos productos que ayudan a la hidratación de tu piel y uñas son el aceite de recino y el aceite de almendras.

Aplica un producto protector.

Aplicar una capa protectora como un endurecedor puede ayudar en gran magnitud a que nuestras uñas se fortalezcan. No obstante, si sueles pintarte las uñas frecuentemente, es recomendable que no las pintes durante un tiempo para que los poros no se obstruyan y así impedir que se estropeen.

Mujer mordiéndose una uñas. Fuente: Pinterest: unidosmundo.blogspot.com.ar

En cuanto al hábito de morderse las uñas, también conocido como onicofagia, presenta consecuencias bastante serias para la salud, no es un asunto únicamente estético. En los dedos y las uñas contenemos una gran cantidad de microorganismos, algunos de ellos son patógenos, que en contacto con la boca pueden provocar una infección. Tanto es así que al morderte las uñas puedes lastimarlas de una forma irreparable, así como también perjudicar a tus dientes y encías.

Como en cualquier proceso de deshabituación, la fuerza de voluntad es el primer paso y el más importante para dejar de morderse las uñas. Intenta tener paciencia y sé fuerte porque el resultado definitivamente merecerá la pena.

Trata de averiguar en qué momentos te muerdes las uñas para intentar evitarlos. Busca un elemento sustitutivo que sea rápido y saludable. Por ejemplo, tienes la opción de beber un traguito de agua o tomar un aperitivo saludable, sino, prueba con realizar respiraciones profundas.

Asimismo, en las farmacias se venden unos esmaltes especiales con un sabor muy desagradable. Aplica dicho esmalte transparente de forma diaria y, una vez a la semana, retíralo con quitaesmaltes. Otra posibilidad es ponerte uñas postizas, ya que también pueden contribuir a no mordértelas haciendo el papel de barrera, puesto que no podrás llegar a tus propias uñas.

De este modo, has podido observar que tus uñas son una parte muy importante de tu cuerpo y tu estética. Merecen los mismos cuidados que le puedes proporcionar a tu pelo o tu piel. Si sigues estos cuidados para evitar las uñas debilitadas e impedir mordértelas, podrás cooperar a que tu manicura se vea de una forma radiante y saludable, pero sobre todo harás que tus uñas crezcan de manera más rápida y sanas. ¡Anímate a mimar tus uñas!

Estética y música, una combinación para el éxito

Triunfo: un trofeo que se alza en medio de un terreno de juego tan gratificante pero, a la vez, tan hostil como es el mundo de la música. Parece haberse convertido en el bien más codiciado y perseguido por sus jugadores con el fin de darle caza, aunque para cada uno de ellos adopte formas y significados completamente distintos. Es en este momento, y dejando de lado la multitud de factores que pueden verse implicados, cuando entra en acción una pregunta que se mantiene en el aire. ¿Se ha vuelto indispensable una estética definida para destacar en la música?

Hagamos un rápido experimento: elige el videoclip de un artista al que nunca hayas escuchado, pon la canción en mute e intenta averiguar qué está sonando únicamente observando su apariencia. ¿Lo has conseguido? Es curiosa la manera que tiene la música de sumar una dimensión estética a la suya propia, la sonora.

Haciendo un barrido visual por el panorama musical actual, resulta inevitablemente cuestionable plantearse hasta qué punto un artista puede llegar a vender solo a través la imagen que proyecta. Es abrumador el poder de estos artistas que hacen las veces de influencers para conseguir que llenen las calles hordas de Justins Biebers o Beckys G que aspiran a ser como ellos.

Estética y música forman el tándem perfecto cuando lo que impera es el talento. Un caso muy ilustrativo es el de Rosalía, cuyo estilo original, completamente identificable y resultado de una fusión de componentes que confluyen también en sus canciones ha servido de inspiración en multitud de ocasiones para diversidad de compañeros de la profesión entre los que resaltan nombres como los de Lola Índigo o Karol G. Nunca antes las uñas postizas y el chándal se habían llevado tan bien compartiendo el pódium de lo que está a la moda.

Ariana Grande, con sus ya tradicionales coletas altas; Billie Eilish o Miley Cyrus, con estilos arriesgados y atrevidos; Bad Bunny, J Balvin, Bad Gyal o Nicky Minaj en un plano más urbano son otros ejemplos de una estética con nombre y apellidos. The Weeknd ha sabido servirse de ella para contextualizar y dar sentido a todo el círculo que rodea cada uno de sus nuevos discos.

Desde Leiva, con un estilo más relajado, la guitarra y el sombrero, hasta Camilo con un carácter más playero y un bigote que se convierte en el protagonista de todo su atuendo. Sea cual sea su estilo musical, cada artista se esfuerza por marcar su propia personalidad, pero esto viene de lejos.

Si algunos de los cantantes actuales llaman la atención gracias a su apariencia rompedora, basta con dar un pequeño salto hacia atrás en el tiempo para toparnos con artistas de la talla de Mecano o Alaska para comprender hasta qué punto la estética siempre ha sido signo de identidad propia. David Bowie, Freddie Mercury o Michael Jackson son solo algunos de los grandes nombres que han conseguido cautivar a generaciones que llegan hasta la actualidad además de por su derroche incuestionable de talento, por la particular propuesta física con la que envolvían sus canciones.

La sociedad actual se encuentra completamente saturada de estímulos visuales devorados sin piedad gracias a las facilidades que aportan plataformas como YouTube o a las Redes Sociales. Es por esto por lo que, para poder enganchar a un espectador ya empachado de ofertas, un artista debe haber podido crear todo un universo que incluya desde su música hasta sus videoclips o merchandising, dibujando así un personaje diferente, novedoso, pero sobre todo que transmita verdad. Acento, esa es la palabra que pone Cruzcampo en boca de la gran Lola Flores para referirse a este sello propio tan esencial para que pueda nacer cualquier estrella.

¿Están a la moda tus cejas?

Muchos estaréis pensando qué clase de pregunta es esa. ¿Ahora también tenemos que preocuparnos por seguir una moda en nuestras cejas? Efectivamente. Las cejas han cobrado más vida que nunca. En los últimos años, se ha ido dando cada vez más importancia a las cejas y, ahora, con la llegada de las mascarillas, toda parte visible de nuestra cara juega un papel crucial en el día a día. 
Ilustración sobre cejas. Fuente: Pinterest / Olivia Santner

Siempre hemos estado acostumbrados a repasar nuestras cejas, a quitar los pelos sobrantes, a llevarlas milimétricamente perfiladas… Pero, desde hace un tiempo, la moda de las cejas se revolucionó. La modelo Cara Delevigne pasó a tener las cejas más cotizadas del planeta, frondosas, anchas y con personalidad propia. Y es así como la moda de las cejas finas dio un giro de 180 grados para convertirse en algo completamente desfasado. De pronto, todo el mundo buscaba unas cejas como las de la modelo británica. 

Modelo Cara Delevingne. Fuente: Google Fotos

El 2021 presenta una tendencia de cejas llamada browning. Consiste llevar cejas más tupidas, de tonos marrones y con un desorden perfectamente imperfecto. Las cejas perfiladas ya pasaron a la historia, ahora se busca el espesor y la cantidad. 

Son muchos los que en su día abusaron de las pinzas y ahora se arrepienten. Está demostrado que el mito de que el pelo de las cejas deja de crecer es cierto. Sin embargo, gracias a las innovaciones en el campo de la estética hay solución para todo. Hoy en día puedes corregir tus cejas mediante la pigmentación

La pigmentación de cejas está en tendencia y consigue un acabado muy natural. Se considera el siguiente paso lógico en el camino que abrió el tatuado de cejas, ya que esta técnica recrea la ceja pelo a pelo

Cada vez son más las famosas que se han sometido a estas técnicas: Kim Kardashian, Penélope Cruz, Miley Cyrus, Katy Perry, Megan Fox, Jennifer Anniston… Todas estas famosas que siguieron la moda de las cejas finas, años después, se han visto obligadas a pasar por la pigmentación para conseguir unas cejas más pobladas. Dentro de esta modalidad podemos diferenciar entre la micropigmentación y el microblading

Foto 1: antes y después de Blanca Suárez. Fuente: La Maison del cabello. Foto 2: antes y después de Katy Perry. Fuente: google fotos. Foto 3: antes y después de Miley Cyrus. Fuente: Vix.com

La principal diferencia entre estos dos métodos es la temporalidad; ya que el microblading es semipermanente y la micropigmentación es permanente. El microblading es perfecto si tus cejas se encuentran poco pobladas, desdibujadas o con calvas. La principal característica de esta técnica es que el dibujado se hace pelo a pelo y con pigmentos lo más parecidos a tu color de pelo, lo que consigue un efecto muy natural

En la micropigmentación se utiliza un utensilio llamado demógrafo. Tiene dos agujas: una de una punta y otra de tres a cinco puntas, las cuales sirven para pintar el pelo y sombrear, respectivamente. Los pigmentos solo entran en las capas superficiales de la piel, la dermis y la epidermis. Están hechos a base de aceites hipoalergénicos. Dependiendo del tipo de piel la duración es mayor o menor, pero la media se encuentra entre uno y cinco años

Técnica de micropigmentación. Fuente: YouTube

En el microblading de cejas se utiliza un utensilio llamado tabori, se trata de una pequeña pluma de metal que se asemeja a un bisturí. El proceso es muy sencillo. La pluma de metal sirve para hacer cortes ínfimos en la piel y luego se rellenan con los pigmentos. La pluma es hasta tres veces más fina que la aguja de la micropigmentación. Los pigmentos se quedan en la capa más superficial de nuestra piel: la capa basal de la epidermis y su duración tiene una media entre un año y año y medio

Técnica de microblading. Fuente: Flowww.net

Después de leer todo esto os estaréis haciendo la pregunta clave: ¿cuánto cuesta esto? Tanto la micropigmentación como el microblading rondan los 200 euros. También, hay que tener en cuenta el tipo de pelo. En determinados casos hay que utilizar más de un pigmento, lo que podría encarecer el tratamiento hasta llegar a los 300 euros

Para realizarte cualquiera de estos procesos es necesario someterte a un diseño de cejas. En él te dibujan a lápiz para ver cómo serán las dimensiones de tus cejas, además de un estudio para elegir el tono más adecuado. La sesión dura en torno a una o dos horas. No es dolorosa, pero se suele utilizar crema anestésica. El resultado final se ve pasada una semana, ya que al principio las cejas están más oscuras de lo normal y tienen que soltar un poco del pigmento. 

Aunque esta opción no es disparatadamente cara, también existen en el mercado muchos productos que ayudan a darle vida a nuestras cejas. Los más cotizados son los de la marca Benefit. Son pioneros en el diseño de cejas y siempre trabajan para mejorar la calidad de sus lápices. La última novedad ha sido el lápiz efecto micropigmentación. Tiene un aplicador de triple punta que imita a la perfección el efecto del pelo. Su precio se encuentra alrededor de 30 euros

Nuevo lápiz de Benefit. Fuente: Mujer México

Puede que elegir lo que hacer con tus cejas no sea una decisión fácil. Si te decides por la pigmentación, las dos técnicas son muy parecidas. El microblading te permite arrepentirte, es decir, puedes probar cómo te quedarían las cejas antes de que elijas la opción definitiva. Esto es gracias a que su duración es corta. Todo esto sin olvidar que las cejas perfectas son las que aportan profundidad a tu mirada, dan expresión y equilibran tu rostro. Aunque nos veamos influenciados por las modas, siempre hay que saber adaptarlas a uno mismo

Todo lo que necesitas saber sobre el Botox

Esta sustancia se utiliza principalmente en el mundo de la estética para rejuvenecer. Sin embargo, también tiene uso para tratar diversas enfermedades. Se descubrió en la década de los 70, cuando el oftalmólogo americano Alan Scott buscaba alguna solución para sus pacientes bizcos. No obstante, aunque se utilice como tratamiento para algunos problemas de salud, también puede provocar algunos efectos secundarios.
Estos son los numerosos músculos faciales.
Fuente: Pinterest: Andrés Sánchez

El botox es una medicina que contiene toxina botulínica tipo A, la cual es una sustancia empleada para el rejuvenecer el rostro principalmente. Esta toxina, obtenida de la bacteria Clostridium Botulinum, provoca una intoxicación alimenticia que puede poner en riesgo tu vida llamada botulismo.

Dicha bacteria puede localizarse tanto en la tierra como en el agua, encontrándose habitualmente inactiva durante años, pero bajo ciertas condiciones se activa y crea la toxina ya nombrada anteriormente. Se consigue de forma biosintética y se suministra en los músculos donde se ocasionan las arrugas o líneas de expresión muy marcadas, relajándolos y conservando la expresión natural del paciente.

Cuando este tipo de la bacteria Clostridium Botulinum se introduce dentro de una solución nutriente, se reproduce durante varios días hasta que acaba con todo el alimento y muere. Utilizando un complejo procedimiento técnico, la toxina botulínica se  recluye, congela y embala en pequeños envases.

Durante este proceso, la capacidad de la toxina botulínica tiene que estar vigilada continuamente. Se hace para garantizar los niveles de calidad necesarios para que sea un medicamento seguro y eficaz. De igual manera, como es un artículo delicado, también necesita ciertas condiciones de transporte.

A mitad de los años 70, el oftalmólogo americano Alan Scott, buscaba algún elemento para relajar ciertos músculos oculares con el objetivo de sanar a pacientes bizcos. Finalmente, triunfó con el descubrimiento de la toxina botulínica. De este modo, dicha toxina se utilizó como medicación para los músculos contraídos del párpado. Asimismo, incluso desde que el Blefarospasmo se valoró como una disfunción neurológica, esta toxina se comenzó a utilizar exitosamente en numerosos desórdenes de movimiento.

Más tarde, Allergan, inc., empresa del Dr. Alan Scott, consiguió la aprobación por parte del organismo estadounidense para el control de alimentos y medicamentos (FDA), para la comercialización y distribución de la toxina, la cual pasaría a llamarse botox. A partir de este momento, el botox comienza a usarse en Estados Unidos. En la década de los 90 llega a Europa, y de ahí, se exparció mundialmente hasta hoy. De hecho, está presente en más de 75 países, y se está utilizando para más de 20 indicaciones diferentes.

Los médicos desempeñan el botox en pequeñas dosis para atender problemas de salud, entre los cuales se pueden considerar:

Eliminación temporal de las arrugas faciales.

Sudoración severa de las axilas.

Distonía cervical, trastorno neurológico que origina contracciones musculares.

Blefarospasmo, es decir, parpadeo involuntario.

Estrabismo (ojos desviados).

Migraña crónica.

Vejiga hiperactiva.

Aquí se pueden apreciar los distintos lugares donde se suele inyectar el botox.
Fuente: Pinterest: scipioni.com.br
¿Cómo se aplica?

Antes de la inyección, el polvo de la toxina botulínica se disuelve y diluye en una solución salina. Después de esta elaboración, debería aplicarse antes de trascurran cuatro horas. Esta se inyecta dentro del músculo afectado, utilizando una jeringa desechable con una aguja fina. Si más de un músculo se encuentra  involucrado, entonces se tendrían que suministrar varias inyecciones.

El botox debe ser inyectado en los músculos sobreactivos. De este modo suelen considerarse entre una y tres inyecciones por músculo. Igualmente, las jeringas son bastante pequeñas, por lo que difícilmente puede provocar dolor. Sin embargo, esto depende de la propia tolerancia de cada paciente.

Por lo general el resultado empieza a hacer acto de presencia a partir del tercer día, o entre el quinto y el décimo día. El máximo efecto se alcanza entre los diez días y las tres semanas, según cada caso. Además, habitualmente se disipan los efectos entre dos y cuatro meses, después de una aminoración paulatina durante varias semanas. Al cabo de seis meses, el efecto de las inyecciones anteriormente suministradas habrá acabado completamente.

Sin embargo, para ponerse inyecciones de toxina botulínica, debes estar saludable y tener al menos 18 años de edad. No obstante, Algunas personas con patologías previas no deben inyectarse de la toxina botulínica, como por ejemplo, quienes:

-Posean enfermedades neuromusculares.

-Se encuentren embarazadas o amamantando.

-Presenten flaqueza en ciertos músculos faciales.

-Cuenten con ptosis (párpados caídos), la piel facial con bastante grosor o facciones asimétricas.

-Dispongan de problemas de piel cerca del área de la inyección.

Aquí se observa hacia dónde se estiran los músculos faciales. Fuente: Pinterest: Christa Aramass
¿Qué consecuencias puede acarrear?

Sin embargo, este tratamiento también puede fracasar, concretamente puede ser de dos formas: siendo completamente ineficaz o perdiendo efectividad con las sucesivas sesiones. Este fracaso puede deberse a varios motivos. Algunos pacientes pueden desarrollar anticuerpos que contrarrestan el efecto de la toxina o algún tratamiento puede ser ineficiente debido a dosis insuficientes o incorrecta colocación de la misma en los músculos.

Como cualquier otro medicamento, el botox o toxina botulínica  puede presentar efectos secundarios. Esto depende del lugar en el que se administra. El primero de ellos puede ser una reacción alérgica que puede originar los siguientes síntomas: inflamación de cara y garganta, dificultad para respirar, urticaria y sibilancias.

Otros efectos secundarios suelen aparecer en los primeros días posteriores a su aplicación. Normalmente son temporales. En ocasiones, pueden prologarse durante meses.

Sin embargo, en el prospecto de esta medicación aparece una lista de efectos adversos que han presentado pacientes alguna vez:

Inflamación de capas profundas de la piel.

Urticaria.

Daño nervioso (plexopatía braquial).

Problemas al hablar.

Caída de los músculos de un lado de la cara.

Enfermedad crónica que afecta a los músculos (miastenia gravis).

Dificultad para mover el brazo y el hombro.

Adormecimiento.

Convulsiones y desmayo.

Aumento de la presión ocular.

Estrabismo.

Visión borrosa.

Dificultad para ver claramente.

Disminución de la audición.

Ruidos en el oído.

Sensación de mareo o vértigo.

Problemas de corazón incluido ataque cardiaco.

Neumonía por aspiración.

Problemas al respirar.

Dolor abdominal.

Diarrea.

Por lo que si deseas recibir inyecciones de botox, es de suma importancia que informes a tu médico sobre tu historial médico y sobre cualquier medicamento recetado, vitamina y suplemento que estés tomando.