Rompiendo los cánones de las películas españolas comunes, Guillermo del Toro consigue sorprendernos creando este film lleno de fantasía y realidad con un gran trasfondo simbólico y pedagógico
Fotograma de la película
El laberinto del fauno es una película estrenada en 2006 por el famoso director español Guillermo del Toro. El director nos cuenta la historia de Ofelia (Ivana Baquero), una niña que vive en plena posguerra española junto a su madre (Ariadna Gil), quien está embarazada de su nuevo esposo (Sergi López). Este ostenta el cargo de capitán nacional y tiene la misión de capturar a la resistencia republicana. Tras llegar a la casa, Ofelia se adentra en un mundo mágico que le promete una nueva vida como princesa a cambio de superar tres pruebas.
Esta película —como muchas otras de fantasía— está llena de alegorías. Para empezar, encontramos dos mundos totalmente diferentes. Uno lleno de violencia y crueldad, mientras que el otro es una utopía donde reina la armonía y la paz. Esto es una clara crítica de la situación socio-política de la época tratada. El fauno (Doug Jones), un ser de la mitología romana caracterizado por ser el dios de los campos y bosques, es el nexo entre ambos mundo. Este ser es quién pretende llevar a Ofelia a otro lugar alejado de la absurda realidad que la rodea en el mundo real.
En la película encontramos los ojos como un símbolo muy importante, recordándonos que muchas veces no los usamos para ver. Esto lo vemos reflejado en muchas escenas como en el momento en el que Ofelia le coloca el ojo perdido al fauno o cuando intenta explicarle a su madre lo que ha visto pero ella no la cree, ya que la madre sólo «ve» con los ojos.
Respecto al padre, encontramos un paralelismo con el titán de la mitología griega, Cronos, quien devoró a sus propios hijos y, a su vez representa el tiempo. Esto se refleja muy bien en la película ya que está continuamente ligado al tiempo y es malvado tratando muy mal a su hijastra y su esposa.
El sentido figurativo del laberinto, en ningún momento Ofelia debe cruzar un laberinto sino que debe superar las pruebas para conseguir ser princesa. A su vez, cada misión significa algo.
La primera nos recuerda a la represión del patriarcado, ya que en primer lugar debe deshacerse de la ropa femenina y delicada. Más tarde, enfrentarse al sapo que está matando al árbol que podríamos suponer que es de género femenino, véase como tiene forma de útero. De hecho esta lucha contra el patriarcado lo vemos en numerosas escenas de la película cuando la madre se enfrenta a su marido.
Fotograma de la película
En la segunda prueba, encontramos un banquete que representa la abundancia de riqueza y poder. El fauno pretende poner a prueba la codicia de Ofelia pero finalmente, no es superada, con lo que el fauno decide retirarla de la última prueba. No obstante, más tarde le da la una nueva oportunidad.
Fotograma de la película
En la tercera, encontramos el sacrificio y la desobediencia. El fauno le pide obediencia al atentar contra la vida del bebé, su hermano. Sin embargo, Ofelia se niega a hacerle caso.
Fotograma de la película
Finalmente, entendemos que la última prueba no es dar el bebé sino sacrificarse por los demás. Ser altruista. Al igual que el médico de los nacionales al no obedecer las órdenes del capitán, el padrastro de Ofelia, y acabar con el sufrimiento de un miembro de la resistencia en lugar de seguir torturándolo. En este momento, ambos son asesinados pero al final entendemos que fue la mejor decisión pese a todas las consecuencias.
“Obedecer por obedecer así sin pensarlo. Eso sólo lo hacen gentes como usted capitán.”
Frase del médico.
Por tanto, esta película consigue dar una dosis de la cruda realidad y pretende enseñarnos lo que es correcto y que actuemos como lo hicieron la madre, el médico y nuestra protagonista.
Valoración de la película
⭐⭐⭐⭐⭐
Puntuación: 4.5 de 5.
Es una película que no deja ni un suspiro. La acción va sucediendo rápidamente. Está llena de simbolismos que van reflejando y juzgando la realidad en la que vivimos. Por ello, es una película que nos hace reflexionar sobre nuestros comportamientos y los de los demás. Junto a esto debemos destacar el excelente papel que tienen todos los actores y la original puesta en escena.
Cumple tan bien las expectativas y objetivos del director que ha sido premiada numerosas veces. Véase como logró 3 veces la estatuilla de los Óscar por la dirección, maquillaje y fotografía, entre otros premios.
“Si conseguimos que una generación crezca libre en España, nadie les podrá arrancar nunca la libertad, nadie les podrá robar ese tesoro”.
Esta cita es un fragmento de uno de los diálogos de la película, en ella reside el verdadero significado y mensaje de la misma; pero no solo la he usado como entradilla por ser uno de esos “pellizcos emocionales” que te da esta preciosa película, si no también porque va a tener su peso en este artículo.
Esta finísima película estrenada bajo la dirección de José Luis Cuerda (Amanece que no es poco, Así en el cielo como en la tierra) está basada en tres cuentos de Manuel Rivas: La lengua de las mariposas, Un saxo en la niebla y Carmiña. Protagonizado por Fernando Fernán Gómez, sin duda alguna, uno de los rostros del cine español y por un jovencísimo Manuel Lozano, esta adaptación escrita por Rafael Azcona cuenta la historia de Moncho, un niño que asiste por primera vez al colegio tras una infancia marcada por su mala salud debido al asma que sufría.
Aunque muestra una actitud reacia al principio ya que “tenía miedo a que en la escuela le pegasen”, en el momento que conoce a su profesor, Don Gregorio, Moncho se enamora de la escuela y de la naturaleza.
Contextualizada en la zona rural de Galicia, en pleno 1936, este drama desgarrador a la par que emotivo te conduce desde el ocaso de la II República española hasta el estallido de la Guerra Civil.
Don Gregorio (Fernando Fernán Gómez) y Moncho (Manuel Lozano) cazando mariposas en una de las escenas de la película.
Volviendo a la cita del principio, la película te muestra el contraste de las llamadas dos Españas en el contexto previo a la guerra civil; por un lado, la más tradicional, autoritaria y católica, por otro, la España progresista y esperanzada en el nacimiento de la democracia.
Sin embargo, la película prefiere no contarte esto desde un punto de vista seco que pueda llevar a los espectadores a cierta polémica (tampoco lo vamos a hacer en este artículo). Lo hace desde el proceso de educación de un niño y cómo la etapa en la que está construyendo su propios valores, creencias y personalidad se ve destruida por el miedo a la represión franquista.
Para entender este viaje personal que realiza nuestro pequeño protagonista, antes debemos de conocer y analizar la relación que tiene con Don Gregorio.
Fotograma de la película en el que vemos a Don Gregorio (Fernando Fernán Gómez) y Moncho (Manuel Lozano)
Moncho es un niño curioso, interesado por todo lo que le rodea, rápidamente se enamora de aprender y del método de aprendizaje que le ofrece Don Gregorio, un profesor que huye de aquellos métodos tradicionales de enseñanza, y mucho más de las formas de castigo que atemorizaban a los niños de la época. “Don Gregorio no pega”; es una persona enamorada de la naturaleza, quien enseña valores a partir de la misma y, aunque, es un gran defensor de la república, él no es partidario de que sus alumnos tengan que compartir su propia opinión, les hace pensar y reflexionar bajo su propio criterio.
Esta faceta deDon Gregorio no solo es crucial para captar el mensaje de la película —la libertad—, también lo es para el crecimiento de Moncho, quien en su propia casa está condicionado por sus padres, cada uno representando a un modelo de esas “dos Españas” que comentábamos anteriormente. Por esta razón, la verdadera intención de Don Gregorio es que el joven aprenda y construya su propia personalidad en función de sus propias creencias desde una edad bien temprana.
Pero, ¿a dónde quiero llegar realmente con esto?
Fotograma de la película.
Lo que se intenta transmitir en esta película es la importancia de crecer en libertad. De que una persona se forje sus propios argumentos en base a lo que realmente crea como fruto de una educación en la que no hubiese ningún techo que mermase la libertad en cualquiera de sus vertientes; unalibertad que se vio eclipsada tras los fatídicos años de la guerra.
Podría hilar ese aspecto de pérdida de la libertad en la educación con algún que otro titular actual, pero como he dicho anteriormente, si la película no quiso entrar en polémica en ese sentido, ¿quién soy yo para hacerlo a raíz de ella?
Valoración
⭐⭐⭐⭐
Puntuación: 4 de 5.
Es una película preciosa, muy fina y emotiva; una película con mucho subtexto que hay que ir desmenuzando poco a poco.
Sin duda alguna, una de las joyas del cine español.
Juan de Dios Mellado fue elegido Director General de RTVA en 2019. Desde entonces ha impulsado la modernización de Canal Sur para poder competir en el ámbito digital con otros medios de comunicación. Hablamos con él sobre su opinión del periodismo actual y el futuro de la cadena autonómica más reconocida en España
En primer lugar y para conocerle un poco mejor, ¿qué le llevó a estudiar Ciencias de la Información?
En mi casa es por tradición familiar. Tanto mi abuelo como mi padre y algunos de mis tíos son periodistas. Desde pequeño he vivido el periodismo en casa y, de hecho, mi padre era redactor jefe del Sol de España, un periódico legendario de la provincia de Málaga. Los fines de semana, en vez de irme a jugar al fútbol, iba con mi padre y me tiraba allí todo el día jugando en la rotativa, en los cuartos oscuros que había antes de fotografía, con los teletipos… Me he criado desde pequeño en una redacción, lo tenía tanto por herencia familiar como en la sangre. Desde pequeño tenía claro que quería estudiar periodismo.
Fue enviado especial al llamado Genocidio de Ruanda, la guerra civil que hubo en 1994. ¿Qué puede contar de su experiencia allí?
Pues es de las experiencias profesionales más gratificantes sin duda, pero también muy dura. En toda España, y concretamente en Málaga, hubo un movimiento de recogida de fondos para enviar ayuda tanto médica como alimentaria por parte de varias ONG’s como Médicos del Mundo, Cáritas o UNICEF. Por ello se decidió enviar a una serie de periodistas que contaran cómo llegaba la ayuda humanitaria. Entonces me presenté voluntario en el periódico y estuve catorce días en la ciudad de Goma, al lado del Lago Kivu, cubriendo el mayor desastre humanitario que ha habido en los últimos años en el mundo.
Me enseñó la parte mala del ser humano, pero también su bondad. Muchas personas desinteresadas dejaron de lado su comunidad para ayudar a un país que estaba en Guerra Civil y en descomposición. Como periodista fue apasionante el poder mandar crónicas de lo que estaba pasando allí y contárselo a Europa. Encontrar los medios para transmitirlo era complicado —estoy hablando de un año donde no había móviles ni casi Internet—, tenías que buscarte la vida.
Genocidio de Ruanda. Fuente: EcoRed
Apostó por la renovación digital cuando dirigió La Opinión de Málaga, ¿por qué es importante para el periodismo adaptarse a la era digital?
Yo me incorporé en 1999 como uno de los fundadores del periódico del grupo Prensa Ibérica. En aquella época las páginas web de los periódicos estaban en periodo de efervescencia, pero aún no se veía la potencia de hoy en día. En 2013 decidimos hacer la transformación digital del periódico porque vimos que las formas de consumo estaban cambiando y que la venta de los periódicos en kioscos bajaba.
Hicimos un plan para integrar la redacción digital, que estaba apartada en una esquina de la redacción, y ya empezamos a trabajar para volcar la información en Internet. Fue una experiencia muy interesante, porque veníamos de la prensa escrita tradicional de toda la vida, con unos ritmos y una forma de trabajar diferente. Se cambió la forma de trabajar del periodista, sobre todo por la inmediatez. Con eso aprendimos que el futuro del periodismo estaba también en la web.
Existe la opinión de que el periodismo de papel está muriendo, ¿cómo cree que se adaptarán los medios cuando esto ocurra?
Hubo tres factores que caracterizaron la entrada de los periódicos tradicionales en la web. En primer lugar, la carrera para ver quién difundía mayor contenido y de forma gratuita, con el afán de ganar muchos usuarios. En segundo lugar, se cambiaron los titulares a unos más frívolos, es decir, nada periodísticos para captar a la audiencia. Y en tercer lugar, teníamos pocos conocimientos del tema, a diferencia de los periódicos nativos nacidos en Internet. Hubo una carrera desquiciada para tener presencia en Internet, aunque se hizo sin tener una estrategia clara de cómo comercializar esa información.
Estadísticas de ventas de ejemplares en papel. Fuente: El Español
Nunca ha habido en nuestro sector un acuerdo entre las editoriales —si uno pone un muro de pago y el otro no, la audiencia se va al que no—. Ahora se ha revertido y ya se están instalando muros de pago o suscripciones con ciertas ventajas que establecen un modelo de negocio. Esto permitirá que el periodismo digital deje un poco esa frivolidad para ganar audiencia.
En cuanto al papel, aquel que siga haciendo productos de calidad no va a desaparecer porque va a ser un periodismo más analítico, sosegado y reflexivo. Hay muchos que hacen versiones digitales semanales potentes y los fines de semana dan una oferta buena en papel. Por tanto seguirá, pero ya no como lo concebimos: se buscará el por qué y no el qué.
Como profesional de la comunicación, ¿qué opina acerca del desprestigio que tiene en España esta profesión?
El periodismo en España es fruto de la sociedad que tenemos. Actualmente hay una polarización entre la izquierda y la derecha, y los periodistas se han situado en una u otra trinchera. Esto hace que se pierda la esencia del periodismo de ver, oír y contar y no posicionarse en lo que está pasando. Esta polarización, que cada vez es más agresiva, se ha llevado también al periodismo y esto pasa factura.
La sociedad hoy es más madura y, afortunadamente, los ciudadanos se dan cuenta de cuándo una información está caducada, les intentan mentir o manipular. Es muy difícil que el periodista pueda engañar al ciudadano. Pero aun así creo que el periodismo goza de buena salud, porque con los nuevos medios y soportes, se puede tener buena información.
¿Cree que esas críticas hacia la profesión son acertadas?
Hay que distinguir entre la buena y la mala praxis periodística. En las redes sociales abundan las fake news y muchos periódicos tienden a captar al lector con titulares cebo. Pero no todo vale. El buen periodismo es reconocido por la gente y tiene su recorrido. La pregunta que yo me hago es quién dejó antes a quién, ¿el periodismo a la ciudadanía o la ciudadanía al periodismo? Los periodistas tenemos que reivindicar nuestro papel como prescriptores de noticias verdaderas porque si no, los ciudadanos no nos verán como útiles y se informarán donde circulan bulos. Ahora prima la inmediatez, cuando es mejor dar una noticia bien contrastada y con cantidad de información. También la ciudadanía tiene que aprender a profundizar en la información y no leer solo los titulares porque, al final, tendrá un conocimiento fragmentado de la realidad.
Estadísticas de fake news. Fuente: SciELO
¿Qué cambios ha introducido en RTVA?
Ahora tengo el reto de transformar digitalmente RTVA para que pueda ser competitiva en el futuro. Estamos creando nuevos soportes como una plataforma de consumo bajo demanda, que estará operando en octubre o noviembre. En ella se van a introducir algunos contenidos históricos más los que estamos haciendo ahora expresamente, que permitirá que los contenidos de Canal Sur no se vean solo en Andalucía. Gracias a esta plataforma, va a haber una labor de difusión del patrimonio cultural de Andalucía. En radio también hemos creado una plataforma de podcasts que ya está en marcha. Estamos intentando que RTVA alcance también los nuevos hábitos de consumo y es un reto apasionante.
Plataforma de podcasts de Canal Sur. Fuente: Canal Sur
Después renovar e impulsar la empresa, queremos reafirmar que pretendemos seguir siendo RTVA con todos esos cambios. Canal Sur entrará en este año, 2021, en la carrera por los nuevos hábitos de consumo tanto de televisión como de la radio.
Canal Sur está siempre muy analizada por otros medios, ¿cómo gestiona esa presión que existe sobre la empresa?
Al ser una empresa pública financiada con dinero público es normal que se nos pidan explicaciones sobre qué hacemos con ese dinero. Ahí no hay problema. Lo que sí veo es que hay un excesivo foco sobre cualquier cosa que hace Canal Sur, tanto por parte de otros periódicos como de las clases políticas. Creo que habría que dejar trabajar a los profesionales de Canal Sur —no solo a la dirección general— porque están cuestionando todos los días lo que se hace aquí.
Si bien es cierto que a pesar de ser contenidos trabajados con mucha profesionalidad, hay información malintencionada que le hace daño a la reputación de Canal Sur. Cuando llegué a este puesto dije que me gustaría que Canal Sur dejara de ser noticia para empezar a dar las noticias. Pero me he dado cuenta con el tiempo de que seguirá siendo objeto de noticia porque hay mucha gente pendiente de lo que pasa aquí. Esto no se va a cambiar. Respeto las opiniones de todo el mundo, no comparto algunas, intento aislarme de ellas y seguir con la hoja ruta que nos hemos marcado para intentar avanzar en la gestión de RTVA.
Teniendo en cuenta la situación política actual y la continua amenaza de la disminución de recortes, ¿cree que Canal Sur podría lidiar con un menor presupuesto que el actual?
Todas las televisiones públicas están mal financiadas. Si un gobierno autonómico, nacional, en Europa, quiere tener un servicio público, eso significa un coste. Ahora, se puede tener con poco presupuesto o con uno que permita cumplir con el servicio público. Lo veo como una doble inversión: cada euro que destina el gobierno de turno a cualquier televisión consigue, por un lado, cumplir con el servicio público que tiene encomendado y, por el otro, desarrollar toda la industria audiovisual.
Canal Sur —como cualquier otra cadena— cuando hace un programa, o lo hace con recursos propios, o recurre al mercado o hace una producción mixta. Por tanto contrata a una productora, con sus debidos empleados, que lo mismo contrata a otra empresa para poner la seguridad en su programa, por ejemplo. Hay un empleo directo e indirecto que ya cumplía con un objetivo, que era el del servicio público y, a la vez, desarrolla la industria audiovisual. Canal Sur es uno de los máximos artífices para que el cine andaluz pueda ser competitivo y que los directores puedan rodar películas gracias a su aportación.
Huelga de Canal Sur en Huelva por los recortes. Fuente: elDiario.es
Por tanto, están mal financiadas y encima se nos exige competir con las televisiones privadas en cuestiones de audiencias, con la limitación que tenemos respecto a cierto tipo de publicidad, como el de loterías y juegos de azar que no admitimos aquí, o respecto a los recursos para nuestros programas, que son menos espectaculares. Las televisiones públicas estamos en un momento difícil. Si el gobierno quiere tener una televisión pública, la tiene que financiar.
Recientemente, con el ascenso de los grupos nacionalistas de ultraderecha por toda Europa, el término nacionalismo está más presente que nunca entre la sociedad. Tendemos a pensar que este concepto está vinculado a una ideología política de derechas, pero no siempre pertenece a esta
Caricatura sobre el nacionalismo. Fuente: José Ibarrola
El nacionalismo surge en Europa a partir de la palabra nación en medio de la revolución industrial, burguesa y liberal. Es una ideología y movimiento sociopolítico basado en el sentimiento a la nación por parte de una comunidad que comparten idea, cultura, religión e historia. En España, encontramos varios tipos de nacionalismo, uno de ellos es el español, que apela a la unidad territorial y se suele vincular a partidos políticos de ultraderecha como Vox, que ha tenido un crecimiento notable en los últimos resultados electorales. Cabe destacar la irrupción tan denotativa en las elecciones catalanas, siendo el partido de derechas con más escrutinio conseguido.
Al ser España un país descentralizado, organizado en comunidades autónomas, ha derivado en nacionalismos periféricos como es el caso del andaluz. Aunque el nacionalismo andaluz no nace en 1978 cuando se le concede la autonomía a la comunidad a través de la Constitución española.
Primeros pasos del nacionalismo andaluz
Hay que remontarse al año 1912, cuando el periódico El liberalsevillano abre la puerta a a una nueva necesidad para el pueblo andaluz bajo la idea política-regional de Andalucía. Este hecho hará que se convoque una asamblea para el 10 de mayo de 1913 en el ateneo de Sevilla conocida como los juegos forales. Esta reunión fue presidida por un catalán, Francisco Cambó, que tenía como objetivo que el poder político andaluz ayudase al catalán. Para Cambó era una estrategia que ayudaría a Cataluña, pero para Andalucía fue un paso importante ya que se le inculca la idea de la independencia productiva del norte de España. En esta asamblea estarían presentes algunos de los padres del idealismo andaluz como Blas Infante, Jose María Izquierdo o Alejandro Guaichot.
A partir de esta asamblea en el Ateneo, se creará la revista Bética, cuyo principal objetivo y finalidad es difundir las nuevas ideas regionalista de Andalucía.
Abandonamos la provincia de Sevilla y viajamos hacia la malagueña, concretamente a Ronda, donde dará lugar el I Congreso Internacional de Economistas Fisiócratas lugar en el que Blas Infante interviene por primera vez públicamente. Hay que destacar la figura del malagueño, ya que en 1915 se convertirá en el líder del movimiento nacionalista andaluz gracias a la publicación de El ideal andaluz. Donde se llama al pueblo andaluz, así como a sus intelectuales al intento de recuperar la identidad de su cultura y pasar de ser una clase temporera a una propietaria.
Blas Infante en el centro de la foto en el I Congreso Internacional de Economistas Fisiócratas, Ronda. Fuente: EFE
El andalucismo de estos años quería acabar con la pobreza de la clase trabajadora andaluza que constituía las 3/4 partes de la sociedad como agricultores o pequeños arrendatarios en el área rural. En los aledaños urbanos, la desigualdad y pobreza se mantendrá, pues los andaluces realizaban trabajos esporádicos y marginales. Esta estructura social desigualitaria no solo se dará en el interior de Andalucía, sino que las desigualdades con respecto al territorio nacional también serán brutales.
Con la dictadura de Primo de Rivera iniciada en 1923, todas las pretensiones nacionalistas andaluzas serán prohibidas, por lo tanto el movimiento perderá fuerza. Pero, la proclamación de la II República abrirá un rayo de esperanza, ya que Blas Infante, que forma parte de varios grupos de izquierda, expresará su idea de formar el Estado Libre de Andalucíadentro de la organización territorial federal de la República. Cuando todo iba en su cauce, se elabora el estatuto de autonomía andaluz con la intención de ser aprobado en junio de 1936.
Entre el 17 y el 18 de julio comienza la guerra civil española que enfrentará a los nacionalistas (españoles) con los rojos. Asesinando los falangistas (nacionalistas) en agosto, en la carretera de Sevilla a Carmona, al padre de la patria andaluza, Blas Infante. En esa madrugada de verano, el malagueño gritó dos veces antes de ser abatido: «¡Viva Andalucía libre!«
Blas Infante. Fuente: EcuRed
Con la instauración del Régimen franquista en 1939, la represión al andalucismo será obvia, ya que chocará con sus planes centralistas y nacionalistas españoles. Esta dictadura será caracterizada por el conservadurismo, mientras que las pretensiones nacionalistas periféricas como la andaluza serán principalmente progresistas. La represión franquista en Andalucía será dura y al mismo tiempo invisible, ya que se saqueó, andaluces que murieron en las cárceles de hambre y no había apenas posibilidad de salvarlos.
En los años 60, España vive una apertura hace el exterior, relajándose los efectos más crueles de la dictadura franquista, permitiéndose el nacionalismo andaluz a través de grupos intelectuales retomar el ideario de Blas Infante. Pero marcaremos el año 1975 como clave en el auge del nacionalismoandaluz, no solo le influyó la muerte del dictador Francisco Franco, sino que muchas familias andaluzas debido a la emigración a Europa y otros territorios españoles, se dieron cuentan de las condiciones tan precarias, económicamente hablando, de Andalucía frente a la posibilidad de riqueza que tenía su tierra. También en este viaje tomaron conciencia social y cultural de Andalucía.
Tras ser proclamada la Constitución española de 1978, Andalucía podrá optar a su autonomía por la vía rápida, aprobando el referéndum el 28 de Febrero de 1980.
Fuente: Los carteles del 28F. Junta de Andalucía
Actualmente nos encontramos con muchas organizaciones andaluzas que tienen como nexo común, el ideario del padre de la patria andaluza, Blas Infante. También otro elemento común es la ideología de izquierdas frente a la de derechas que acostumbra tener cualquier nacionalismo. Estas organizaciones tienen como fin desde conseguir la autonomía de la nación andaluza, federalismo o incluso su independencia.
Representación política
Colación Andalucista (CA)
La Coalición Andalucista formada principalmente por el partido andalucista y el partido socialista de Andalucía, tiene como objetivo conseguir un proceso de autodeterminación de los andaluces y de Andalucía. A pesar de estar formado por un grupo bastante amplio de partidos andalucistas, la falta de claridad les ha llevado a no poder tener representación política en el parlamento andaluz.
Candidatura Unitaria de Trabajadores (CUT)
La Candidatura Unitaria de Trabajadores fue el que dio pie a la formación del grupo Izquierda Unida. Se declara como nacionalista andaluz y principalmente representa a grupos rurales y de algunas zonas urbanas. Su ideología es sindicalista, de izquierdas y comunista. Estuvo vinculado a izquierda unida hasta 2015 y tiene representación parlamentaria en Andalucía dentro de podemos.
Adelante Andalucía
Pero sin duda, la representación política que con mayor fuerza ha irrumpido en el parlamento andaluz ha sido Adelante Andalucía. Un grupo antifascista, anticapitalista, de izquierdas y nacionalista andaluz. Es uno de los partidos con más fuerza dentro del nacionalismo andaluz, aunque fue noticia hasta hace bastante poco debido a la desvinculación de su líder Teresa Rodríguez y la expulsión del grupo político Podemos.
Manifestación por los derechos de los andaluces. Fuente: Las Repúblicas.
Símbolos
Como cualquier nacionalismo, el andaluz, también tiene su bandera, creada por el partido socialista andaluz. Esta bandera es conocida como la arbonaida nacionalista de color blanca y verde, pero con una estrella roja en representación de la ideología socialista. Algunos grupos intentaron que la estrella usada fuese la tartésica, pero no cuajó. Además de la bandera, los grupos nacionalistas usan el lema nacionalista creado por Blas Infante:
«Andalucía por sí, los pueblos y la Humanidad»
Blas Infante
Esta bandera suele ser utilizada en manifestaciones que luchan por los derechos humanos de los andaluces y andaluzas. Entendiendo andaluces y andaluzas por personas que no solo hayan nacido en la comunidad autónoma, sino todo aquella persona que haga de Andalucía.
Algunos símbolos del andalucismo. Fuente: @Andalucización
A pesar del gran recorrido histórico del nacionalismo andaluz y el intento de grupos nacionalistas de crear un sentimiento común nacionalista andaluz, no está consolidado. La representación de estos grupos en el parlamento andaluz es escasa y mínima, y los representantes corresponden a partidos políticos consolidados a nivel nacional. Tampoco Andalucía cuenta, a nivel nacional, con un partido fuerte en el congreso de los diputados. Por lo que el ideario que costó la vida a Blas Infante sobre su Andalucía, no ha alcanzado el éxito que mereciese tener. El pueblo andaluz sigue siendo muchas veces el gran olvidado de la política española, por lo que un partido nacionalista consolidado pondría sobre el territorio nacional los deseos e intereses de los andaluces y andaluzas.