El petting, lo que es sexo pero no creías que era sexo

Se llama petting a toda aquella práctica sexual que no conlleve la penetración. Siempre se ha cometido el grave error de asociar el sexo a la introducción del pene en la vulva o en el ano, o peor aún, no considerar sexo a todo lo que no sea eso. Sin embargo, el coito tiene muchos más aspectos y elementos aparte de la típica penetración.

El término petting viene del verbo to pet en inglés, que significa “acariciar”. El habla hispana es bastante amplia con este aspecto. En España es conocido coloquialmente como “magreo”, en Argentina se le llama “franelear” y en México “faje” o “caldeo”.

Con estos conceptos, podemos dilucidar que lo más característico del petting son las caricias, lo cual no quiere decir que no entren otras prácticas como el sexo oral o el uso de juguetes sexuales. Se comete otra equivocación llamándolo preliminares, pues da a entender que es meramente un acto previo a la penetración, y la sobrevalora por encima de lo demás.

Segunda fase del petting. Fuente: Katie Salerno (Pexels)

Existen distintas formas de practicar el petting, pues es una práctica que otorga total libertad y da pie a la imaginación y la creatividad. Pero si estás perdido/a y quieres conocer una forma de hacerlo, puedes guiarte por estas tres fases:

  • Durante la primera fase tienen lugar besos, abrazos o caricias. Además, se empieza a tomar de las manos.
  • La segunda fase consiste en el contacto físico con ropa. Aquí es cuando tienen lugar las caricias y los manoseos, pero siempre por encima de la ropa. Los besos empiezan a cobrar más intensidad.
  • En la tercera y última frase se profundiza más, literalmente. Es aquí cuando las manos ya empiezan a introducirse por debajo de la ropa, aumentando la excitación. Continúan los besos y las caricias. Se puede acabar estando totalmente desnudo/a o conservando la ropa interior, lo cual puede dar aún más erotismo por el misterio. En este momento ya se podría comenzar a dar paso al sexo oral o a masturbar a la otra persona.
Tercera fase del petting, desnudos o en ropa interior. Fuente: Jessica Ticozzeli (Pexels)

Una de las principales ventajas del petting es que el riesgo de contraer ITS (Infecciones de Transmisión Sexual) es mínimo. Solamente habría riesgo sin ropa, pues cuando los fluidos seminales entran en contacto con la tela, se quedan impregnados en esta y no la traspasan. En el caso de que entren en contacto con una zona desnuda del cuerpo que no sea muy próxima a los labios vaginales, el ano o la boca, tampoco existe peligro.

Otro fluido con el que hay que tener mucho cuidado es el líquido preseminal que, aunque no pueda transmitir algunas ITS (VIH, gonorrea…), sí es capaz de hacerlo con otras (Virus del Papiloma Humano, ladillas, sarna…). Además, también existe la posibilidad de provocar embarazo. En definitiva, siempre es recomendable tomar las precauciones pertinentes para que el peligro sea el mínimo posible. Las más efectivas son las barreras de látex, es decir, los preservativos o las láminas.

Las fiestas petting

Anteriormente hemos hablado del petting como una práctica entre dos personas. Sin embargo, también puede realizarse en multitud. Es aquí donde entran en juego las llamadas “fiestas petting”.

Uno de los ejemplos más conocidos que tenemos sobre este tipo de celebraciones es aquel famoso capítulo de la serie Física o Química en el que la llevan a cabo. Esto ayudó bastante a darle visibilidad. Son fiestas en las que tiene lugar el alcohol, la música… Y, por supuesto, el petting. Tienen una regla principal: No está permitida la penetración.

Fiesta petting en la serie Física o Química. Fuente: Atresplayer.

Para organizar esta fiesta, es esencial el sitio. No puede ser en una nave o un local vacío. Se recomienda un espacio amueblado, como una casa o un chalet. De esta forma, hay sofás, camas y otras superficies que permiten practicar el sexo de forma más cómoda.

En tiempos de pandemia, no es conveniente realizar estas fiestas debido a la posibilidad de crear un brote. Por lo tanto, si se acaba haciendo la fiesta, se aconseja que sea con personas vacunadas o que tengan ya anticuerpos de haber contraído el COVID-19 anteriormente.

Por último, el posible consumo de drogas y la presencia de mucha gente dispuesta a esto no debe opacar el aspecto más importante de todos: Que las prácticas sexuales sean con consentimiento.

Las claves del sexo tántrico, qué es y cómo se practica

Cuando pensamos en el placer que da practicar el sexo, siempre nos centramos en los genitales, obviando lo demás. Sin embargo, existen otras vías que nos permiten sentir orgasmos y excitación en otras partes del cuerpo. Este es el caso del sexo tántrico, que plantea otra forma de ver el acto sexual y consiste en asociar el sexo con el yoga para que la energía sexual se traslade a través del cuerpo.

El adjetivo “tántrico” surge del concepto “tantra”, cuyo origen viene de corrientes hinduistas y budistas. Existen tres tipos de sexo tántrico, distinguidos por colores: rojo, negro y blanco. El rojo se centra en las prácticas en solitario, para conseguir una armonía contigo mismo. El negro se centra en las energías oscuras, utilizándola con fines personales y afectando a otros seres. El blanco es el que está más orientado al ámbito sexual, involucrando a una pareja, nos centraremos en este último.

En términos de espiritualidad, el tantra consiste en la unión de dos energías: Shakti (energía femenina) y Shiva (energía masculina). Shiva es la consciencia que impregna todo y a todos, pero que está dormida. Shakti es una energía dinámica necesaria para despertar esa consciencia. Todas las personas tenemos ambas energías, pero siempre predomina una sobre la otra. Con el equilibrio entre las dos se llega a la armonía.

El tantra tiene sus orígenes en corrientes hinduistas y budistas. Fuente: PatrizioYoga / Pixabay.

Sus orígenes religiosos hacen que el tantra tenga un punto de vista tradicional, es decir, centrado en la pareja cis hetero. No obstante, ello no implica que no pueda ser practicado por personas del colectivo LGTBIQ+.

A primera vista parece algo complicado, pero no te preocupes, no tendrás que desempolvar los libros del colegio en los que se explicaba la reproducción. Aunque el sexo siga sin tener manual de instrucciones, al menos te podemos contar los pasos para practicar el sexo tántrico de forma cómoda y sin frustrarse en el intento.

En primer lugar, lo ideal es crear un espacio cómodo y adecuado para el tantra. Nada de redes sociales ni llamadas que te distraigan, pospón esa videollamada que tenías con tu madre para otro momento, pon el móvil en modo avión si es posible. Puedes decorar la habitación con mándalas, y estimular el olfato usando velas o incienso. Otra forma de estimular algunos sentidos es anular otros, por ejemplo, usando una venda para los ojos. La música zen también es bastante efectiva. En definitiva, usa lo que mejor te venga para tener tu templo hindú particular.

Antes de empezar, es recomendable realizar una meditación inicial de unos 10 minutos, sobre todo si es tu primera vez en esta aventura del tantra. Tiene que ser una meditación individual, para estar en conexión contigo mismo.

La meditación antes de comenzar el tantra es muy aconsejable. Fuente: Oluremi Adebayo / Pexels.

Una vez hayas meditado, comienza la fase de miradas. Tienes que colocarte frente a tu pareja, mirando su ojo izquierdo o ambos. Es una forma de transmitir el amor que se siente por los ojos, y de probar sensaciones o tentaciones, como la de apartar la mirada. Haz esto durante dos minutos aproximadamente.

A continuación, coloca tu mano izquierda sobre el corazón y extiende la mano derecha al corazón de tu pareja, haciendo la otra persona lo mismo. Intentad sincronizar la respiración, que sea de forma profunda. Así, podrás sentir el amor de tu pareja mientras inhalas y enviar el tuyo mientras exhalas. Hazlo durante 10 respiraciones.

Después de esto, se pasaría a practicar sexo tántrico, pero también puedes hacer un masaje tántrico a tu pareja. Uno de los dos tiene que tumbarse y así sentir la energía sexual de la otra persona, que moverá sus manos lenta y suavemente sobre el cuerpo de la primera. También puedes pasar a realizar un masaje en la vulva o el pene de tu pareja, o incluso las areolas de los pezones.

Una vez hayas realizado el masaje, o si te has saltado ese paso, tienes que colocarte con tu pareja en la posición Yab Yum, la cual es muy clásica del tantra y representa a Shiva y Shakti. Puedes hacerlo con ropa o sin ella, como prefieras.

Posición Yab Yum representada en una estatuilla. Fuente: KirstentB / Pixabay.

Si cumples el rol de Shiva, tienes que sentarte sobre una almohada con las piernas cruzadas y en una posición de sostén, rodeando con tus brazos los hombros de Shakti. Por otra parte, si haces de Shakti, tienes que sentarte encima del Shiva, frente a frente y rodeando con tus brazos su cintura.

Con esta posición, podrás alinear tus chakras y así permitir que la energía sexual recorra toda tu columna. Una vez conseguida esa alineación, prueba a sincronizar tu respiración con la de tu pareja. Podéis probar a moveros un poco, arqueándoos o balanceándoos suavemente.

Como ves, no es estrictamente necesario llegar al orgasmo en esta práctica sexual. Simplemente se trata de hacer lo que te dicten los sentimientos en ese momento. ¿Lo has probado alguna vez? ¿Qué tal te ha salido? ¿Te ha servido esta guía? Cuéntanos en los comentarios.

Del condón a la inyección: los métodos anticonceptivos masculinos

La protección a la hora de mantener relaciones sexuales es uno de los factores más importantes. Su misión es evitar posibles ETS y embarazos no deseados. Para esto último, aparte del condón, parece que los métodos están siempre enfocados para la persona gestante. Entonces, ¿hay anticonceptivos para la otra parte? Sí, los hay. Hoy veremos cuáles son.
Fuente: BBC.

Los métodos anticonceptivos tienen como misión evitar la fecundación en las relaciones sexuales. Hay muchos tipos, pero hoy nos enfocaremos en los masculinos. Algunos de ellos más conocidos que otros. Cabe destacar que ninguno de ellos es seguro al 100% pero sí que reducen considerablemente las posibilidades de embarazo.

Preservativo masculino

El más conocido y utilizado. Es una funda elástica que se coloca sobre el pene erecto y sirve también para prevenir enfermedades de transmisión sexual. Los hay de látex y, si se es alérgico, también los hay de poliuretano. Se trata de un método sencillo y económico. Además, se encuentra en farmacias o supermercados. Hay de todo tipo de tamaños, texturas y anchos, incluso sabores.

Es un método muy eficaz para evitar la transmisión del VIH. Fuente: Freepik

Un buen uso del condón

  • Comprobar la fecha de caducidad y que no estén dañados.
  • Guárdalos en un lugar fresco y seco.
  • Utiliza solo lubricante de agua.
  • Solo se usa una vez por relación sexual.
  • No se debe utilizar dos condones a la vez.
  • Compruébalo después de mantener relaciones.

A pesar de ser uno de los mejores métodos anticonceptivos, todavía hay quien pone excusas baratas para no usarlo. «Me aprieta», «no tengo ninguna enfermedad» o «confía en mí», son algunas que hemos podido escuchar de primera mano o a través de la experiencia de algún amigo o amiga. Es por esto que debemos tener muy claro su efectividad y calidad, para no caer en argumentaciones vacías que en un futuro pueden tener consecuencias mayores.

El tik toker Farmacéutico Fernández nos presenta un vídeo con las mejores contestaciones para estos casos:

Fuente: Tik Tok @farmaceuticofernandez
Anticonceptivo en gel

Este anticonceptivo se encuentra en fase de investigación pero parece un método revolucionario por el momento. Se aplica por los hombros y en la parte superior de los brazos, no en los genitales. El gel se llama NES/T y está teniendo bastante efectividad.

Consigue reducir la producción de esperma pero sin afectar al libido. Esto se logra gracias al elemento estrógeno sintético que tiene un efecto antiandrogénico por el cual se reduce el número de espermatozoides. Su efecto se espera tras cinco meses de aplicación, aproximadamente.

Los resultados de la investigación que avanza favorablemente se publicarán 2022. Fuente: Freepik
Píldora anticonceptiva

La famosa píldora anticonceptiva femenina tiene su equivalente masculina. La pastilla tiene como nombre DMAU y su compuesto principal es la triptonida. El nivel de testosterona disminuye bastante con este medicamento. Esta píldora también tiene sus efectos secundarios como la subida de peso y la bajada del HDL, «colesterol bueno». Otros son los mareos, la fatiga o el acné.

El estudio llevado a cabo por el Lundquist Institute de Estados Unidos aún está en una fase muy temprana de investigación, por lo que se espera seguir con él a la espera de unos resultados mas esclarecedores y firmes. Se trata de un largo proceso que requiere paciencia. Todo por una buena causa.

Fuente: Pexels
Inyección

Vasalgel se trata de la alternativa a la vasectomía y se pone en los genitales. Se inyecta en el conducto deferente, tubos musculares que une el epidídimo con los conductos eyaculadores, donde el componente polímero pararía la producción de esperma. Su efecto duraría alrededor de unos 13 años. Algunos de sus puntos positivos son el hecho de que no provoca cambios hormonales, ni afecta a la eyaculación ni al orgasmo. Además, es reversible. Empezará a funcionar tan solo 15 minutos después de haber sido inyectada.

Se piensa vender como la alternativa a la vasectomía. Fuente: Pexels
Vasectomía

La vasectomía es una cirugía sencilla en la que se cortan los conductos del escroto que transportan el esperma. Tiene una alta efectividad. El tiempo que transcurre hasta la desaparición total de los espermatozoides en el esperma varía entre los 10 días y el año. Aunque la media es de 80 días según el medio Cuidateplus.

No afecta de ninguna manera al orgasmo o a la eyaculación. Es una operación de bajo riesgo por la que el paciente estará en su casa en un período máximo de 24 horas. Generalmente, es un método irreversible. A pesar de esto, existen complicadas operaciones para revertirlo, como la vasovasostomía o la vasoepididimostomía.

La vasectomía está cubierta por la Seguridad Social en España. Fuente: Unsplash.
La «marcha atrás» NO es una opción

La famosa marcha atrás ha sido tomada como una «buena solución» a la hora de prevenir un embarazo. Aunque hay que recordar: Antes de llover, chispea.

La marcha atrás no es eficaz para evitar la transmisión de enfermedades de transmisión sexual. Fuente: Pexels

El también nombrado coito interrumpido consiste en sacar el pene de la vagina antes de la eyaculación. Hay gente que cree que los espermatozoides se encuentran solamente ahí, lo que es falso. Estos también se pueden encontrar en el líquido preseminal. La página web para padres Kids Health from Nemours determina que 22 de cada 100 parejas que utilizan el marcha atrás tienen un embarazo no deseado.

Por lo común, los métodos anticonceptivos masculinos no han sido tan investigados como los femeninos. Esto es debido a factores sociales, pues se ha considerado y dado por hecho que, en especial, la mujer cis es quien tiene la responsabilidad de prevenir el embarazo al ser ella la gestante. Conforme han pasado los años han surgido diversos estudios para averiguar nuevos métodos anticonceptivos que involucre a las personas con pene. Así esta responsabilidad no recaerá directamente sobre una.

Las bolas chinas: ¿son solo un juguete sexual?

Las bolas chinas, tradicionalmente, son un mecanismo constituido por dos bolas unidas por un lazo o cordón. A pesar de su nombre, fueron usadas por primera vez hace 1.500 años en Japón por un emperador para poder tener relaciones sexuales con sus geishas. Puede que todo esto te resulte familiar o que te suene a “chino”. Ahora bien, ¿qué utilidad tienen estas bolas?

El uso más conocido que tiene es dentro del sexo. Forma parte de un juego sexual que se realiza durante las relaciones y se asocia siempre como juego previo a la penetración. Además, son muy usadas en el sexo taoísta, que consiste en establecer un equilibro entre los dos miembros de la pareja. Es por esto que también se pueden considerar un juguete sexual.

Sin embargo, no es en el sexo donde más influyen las bolas chinas. La mayor utilidad que tiene este elemento es dentro del terreno terapéutico.

Las bolas chinas tienen principalmente una función terapéutica.
Fuente: Cottonbro / Pexels.

Cada vez son más los expertos en fisioterapia, como Laura Rojas (canal de YouTube «EnSueloFirme» que recomiendan el uso de estas bolas para fortalecer tu suelo pélvico. El funcionamiento es el siguiente: Ambas bolas se introducen en la vagina y, mientras está el cuerpo en movimiento, estas rebotan generando una vibración en las paredes vaginales.

Esta vibración provocará una contracción tanto de las paredes como del suelo pélvico, ejercicio que facilita su tonificación y fortalecimiento. La aplicación de las bolas chinas es un complemento muy bueno para los ejercicios Kegel, los cuales tienen como fin fortalecer los músculos del piso pélvico.

Fortalecer el suelo pélvico mediante estas técnicas es lo que se aconseja principalmente si eres una persona que lo tenga debilitado. Este debilitamiento puede deberse a diversos factores: edad avanzada, la práctica de deportes que conlleven impactos altos, partos, embarazos…

Y aunque tu suelo pélvico esté en unas condiciones óptimas, nunca está de más poner en práctica lo anteriormente mencionado. El empleo de bolas chinas es beneficioso para la circulación de la vagina, además de provocar la lubricación de esta, mejorando también las sensaciones recibidas y la calidad de los orgasmos. Con lo cual, genera notables beneficios a la hora de mantener relaciones sexuales.

No obstante, las bolas chinas no solo se pueden utilizar en la vagina. En el caso de que tengas pene, se pueden introducir en el ano. También son muy recomendables, ya que igualmente tienes suelo pélvico y su tonificación previene problemas de erección, próstata o incontinencia urinaria.

Puedes encontrar bolas chinas en tu farmacia de confianza.
Fuente: Anna Tarazevich / Pexels

Las bolas chinas son un artículo muy accesible. Puedes comprarlas en cualquier sex shop o tienda erótica, así como vía online. También se puede encontrar en farmacias. Se aconseja que el material de estas bolas no sea poroso y sea hipoalergénico, es decir, que el riesgo de producir alergias sea mínimo. Un buen material puede ser la silicona de alto grado médico.

A medida que se va avanzando en los ejercicios pélvicos, se cambian las bolas. Es ideal comenzar con unas bolas ligeras, para luego ir aumentando el peso o la cantidad de estas. Para ello, existen unos packs en los que vienen bolas de distintos tamaños y pesos. El diámetro de las bolas oscila entre 3,5 y 4 centímetros. En cuanto al peso, se puede empezar con menos de 30 gramos y alcanzar 70 o incluso 80.

TIPOS DE BOLAS CHINAS

Al ser un elemento que se usa desde hace siglos, ha ido evolucionando con el paso del tiempo. También otros factores como la variedad del cuerpo humano, los distintos ejercicios… Han influido en la existencia de distintos tipos de bolas chinas para una mejor adaptación. Estos tipos son los siguientes:

  • Vaginales: Las más habituales y a su vez más usadas. Se pueden introducir en la vagina durante unos minutos cada día.
  • Anales: Aparte de su uso terapéutico, son muy útiles de cara al sexo. Con estas bolas puedes experimentar una estimulación anal y te ayudan a dilatar el ano para una mejor penetración.
  • Con vibración: Pensadas también para ofrecer placer y sensaciones nuevas. En ocasiones aparecen reguladas por mando a distancia.
  • Una bola: Solamente contienen una bola. Se suelen recomendar a principiantes en ejercicios Kegel.
Excepciones para su uso

A pesar de su alta recomendación por parte de expertos y sexólogos, existen ciertos aspectos excepcionales en los que no se aconseja usar las bolas chinas. No se deben usar en estos casos:

No puedes usarlas si tienes una infección urinaria o sientes dolor a la hora de introducirlas. Si utilizas tampones absorbentes, tampoco puedes introducir las bolas en la vulva. Tanto el embarazo, como la penetración en el sexo son momentos en los que tampoco hay que utilizarlas. Por último, no se recomienda en las semanas posteriores a una cirugía o durante una cuarentena.

En conclusión, las bolas chinas pueden utilizarse independientemente del sexo o aparato reproductor de la persona. A pesar de que son más conocidas en el ámbito sexual, lo más esencial e importante siempre va a ser los beneficios que aportan a la salud, debido a los grandes beneficios que conlleva.

Iniciación al BDSM para principiantes

¿En qué piensas cuando digo BDSM? Seguro que se te viene a la cabeza fustas, sogas o el cuarto rojo de 50 sombras de grey. Pero, te aseguro que el BDSM es mucho más que eso y, para descubrir todo lo que significa, debemos desterrar de nuestra mente al señor Grey como modelo estándar de persona que práctica el BDSM.
Cristian Grey, la fusta y Anastasia. Fuente: Fotograma de la película 50 sombras de Grey.
¿Qué es?

Cuando se habla de BDSM es un error común pensar que estas siglas se refieren en exclusiva a una práctica sexual cuando en realidad son seis tipos de prácticas que se relacionan, en algunos casos, entre sí.

Bondage: significa cautiverio en inglés y francés. Es la práctica erótica que busca la inmovilización del cuerpo de la otra persona mediante ataduras o restricciones usando elementos como esposas, cuerdas o sogas.

Disciplina: son una serie de prácticas eróticas que se relacionan con la forma de actuar de la persona sumisa relacionado con reglas o protocolos, los cuales si se incumplen implicará un castigo.

Dominación: el rol de dominante toma el control de la parte sumisa recibiendo placer al ejercer poder sobre la otra persona. Sin un sumiso no puede haber un dominante y viceversa.

Sumisión: es la otra cara de la dominación. La persona que acata el rol de sumiso acepta los deseos del dominante y acepta todo lo que la otra persona le haga, siempre y cuando exista un consenso previo.

Sadismo: haciendo referencia al Marqués de Sade, la persona sádica obtiene placer sexual causando dolor físico, como los azotes, o psicológico, como la humillación, a otra persona. Quien acepta este rol se debe preocupar en todo momento del bienestar de su compañero buscando no causar daño.

Masoquismo: rol complementario al sadismo. Persona que obtiene placer al recibir dolor físico y psicológico dentro de unos límites.

Normas básicas

Lo primero, y más básico, es la comunicación. En las relaciones sexuales, la comunicación es muy importante, tanto fuera como dentro de la cama, pero cuando se realizan este tipo de prácticas se convierte en un factor indispensable.

El BDSM se rigen por otras siglas, SSC, seguro, sensato y consentido. Esto quiere decir que todo lo que ocurra en el encuentro sexual debe ser consensuado y especificado previamente, sin traspasar nunca los límites del dolor físico o la humillación.

Las fustas son uno de los elementos más usados en el BDSM. Fuente: Pexels.

Para ello debéis crear una serie de normas, una especie de contrato, con las que ambos se sientan cómodos. Nadie debe hacer nada que no quiera o no le apetezca. La confianza en la otra persona es muy importante, por lo que este tipo de planteamientos se deben hacer siempre con alguien en quien confíes y en que no dudes que pondrá freno cuando sea necesario.

Tener una palabra o un gesto de seguridad ayudará a que todo vaya sobre ruedas y que lo más importante sea el placer. Si en algún momento del encuentro sexual se dice la palabra de seguridad el juego debe parar de inmediato.

¿Jugamos?

Aunque no lo creamos hay pequeñas prácticas que se integran casi desde el inicio en los encuentros sexuales que son en su esencia BDSM, aunque de una intensidad débil. Desde los mordiscos pasando por los arañazos, hasta los azotes son una primera muestra de BDSM, y si este tipo de actividades eróticas te excitan es hora de experimentar y descubrir hasta que sitios inexplorados os puede llevar el bondage o los roles.  

Vídeo tutorial de como usar un cinturón como esposas. Fuente: TikTok.

La forma más común de inicio es el bondage. Al tratarse de una práctica sencilla y que puede llevarse a cabo sin mucho atrezo, ya que se pueden usar para inmovilizar cinturones, corbatas o pañuelos de tela.

Para empezar, podéis optar por la privación de alguno de los sentidos como por ejemplo la vista. Sin visión la persona sumisa queda a merced del dominante quien decide que hacer y que no, dándole a todo un factor sorpresa muy excitante.

En este momento se puede usar todo lo que imaginéis, y que haya quedado consensuado para dar placer. Vibradores, lubricantes que incluyan estimulación, hielo, fustas para azotar… Deja volar la imaginación.

Otra práctica dentro del bondage con la que se puede comenzar es con la inmovilización de manos o piernas. Al igual que en la privación de sentidos, el sumiso queda bajo la voluntad del dominante, y esta vez incluso más, ya que, aunque no veas puedes moverte, pero aquí no.

Las ataduras que se usen deben estar bien aseguradas para que no sea fácil quitarlas, pero sin hacer daño por el roce o sin que lleguen a cortar la circulación. Puedes atar directamente las manos o, si la cama tiene un buen cabecero, atar ahí a tu compañero.

Bondage para principiantes. Nudo para usar en un cabecero. Fuente: Diversual.
Después de la tormenta viene la calma

Al terminar hay que volver a conectar con la realidad. Durante el encuentro sentirás muchas emociones, sentimientos y sensaciones que poco a poco hay que ir disipando para dar paso a un periodo de cuidados. La persona dominante debe abandonar su rol y cambiarlo completamente volcándose en cuidar del sumiso, preocupándose por sus necesidades y procurando su bienestar. Es el momento de hablar y comunicar con la otra persona que tal ha sido la experiencia, si os a gustado o si no, cosas a mejorar o si directamente esto no es lo vuestro.

El sexo es muy amplio y existen miles de practicas por las que recibir placer. El BDSM es una más con la que no debe dar miedo experimentar.

¡Ayuda! Quiero hacer una orgía y no sé cómo

Puede que participar en un orgía te haya dado alguna vez curiosidad o se trate de una de tus fantasías sexuales. Quizás te hayas lanzado alguna vez y el resultado no ha sido el esperado. ¿Quieres saber cómo participar u organizar una orgía?

Para poder formar parte de una orgía primero hay que tener claro qué es. Una orgía es una actividad sexual en la que más de tres personas mantienes relaciones de forma consensuada. Es un tipo de sexo en grupo en el que puede o no haber ciertas normas que los participantes hayan manifestado de forma explícita.

Otro aspecto que hay que tener en cuenta es que las orgías reales no se parecen a las que se graban en la pornografía. La pornografía es ficción y por ello no debe tomarse como ejemplo ni esperar que esta práctica sexual se asemeje a esa representación.

Cuando se piensa en participar en un orgía surgen muchas dudas sobre cómo es la forma adecuada de organizar una de ellas ¿por dónde se empieza?

Esquema representativo del proceso para hacer una orgía. Esquema realizado con el programa Miro.

Organiza y planifica el placer

Cada orgía es una experiencia y una vivencia diferente, si quieres lanzarte a participar en una hay algunos pasos que pueden ayudarte a llevar a cabo esta práctica sexual.

Es importante elegir con qué personas queremos llevar a cabo esta práctica sexual, existen dos opciones: personas conocidas o desconocidas. Si es la primera vez es más fácil que te sientas a gusto con personas conocidas.

En el caso de hacerla con conocidos haz una lista de aquellas personas por las que tienes atracción y descarta a aquellas que crees que jamás participarían en una orgía. Si en esta lista tienes a algún amigo o amiga, es conveniente valorar si la experiencia compensa. Mantener relaciones sexuales con alguien con quien mantenemos una estrecha amistad puede hacer que esta relación cambie y se genere incomodidad entre ambos.

Fuente: Fotografía de Dainis Graveris / Pexels.

Si prefieres experimentar con personas que no sean de tu entorno hay varias opciones. Existen locales que organizan estas prácticas y grupos abiertos en redes sociales como Twitter o WhatsApp. Investiga y busca uno que tenga unas normas que se adapten a lo que tú quieres y te den confianza.

Si por fin tienes tu lista, esos nombres son tus contactos. Ten en cuenta la relación que tienes con estas personas, sácales tema de conversación y luego díselo. No hay una fórmula exacta para proponer este plan, pero hazlo de forma natural. Puedes simplemente decir que quieres experimentar algo nuevo y has pensado en esa persona.

Si tienes pareja, participe o no en la orgía, hablad antes y marcad vuestros propios límites. En el caso de participar juntos es conveniente estipular si participareis estando juntos o por separado.

Fuente: Fotografía de Dainis Graveris / Pexels.

Una vez hayas acordado con las personas con las que organizarás la orgía una fecha debéis hablar de qué prácticas no estáis dispuestos a llevar a cabo. Esto es muy importante ya que es una práctica sexual consentida por todos y el objetivo es que todas las personas participantes disfruten. Aquí se debe determinar, por ejemplo, si se no quieren mantener prácticas anales, vaginales u orales, azotes, mordiscos…

No vayas directamente al grano, piensa en el encuentro como una quedad entre amigos en un bar o para comer. Hablad para romper el hielo y templar los nervios, no es necesario que la conversación sea en torno al sexo. Sí pueden llevarse a cabo juegos que aumenten la temperatura como el Yo Nunca o el Verdad o Atrevimiento. Estos juegos permitirán crear un ambiente más propicio al momento.

Disfruta, goza y experimenta

Las orgías son la práctica sexual perfecta para experimentar. No tengas miedo de explorar tu sexualidad y probar cosas nuevas, puedes descubrir algo nuevo que te excita, pero nunca aceptes hacer algo con lo que no estés cómodo. Que participes en una orgía no significa que debas hacer y dejarte hacer todo, marca los límites y si no se respetan estos, vete. Comunícate con las personas con las que estás. Hazlo verbalmente o mediante caricias, haz saber que te gusta o no lo que te están haciendo.

Puedes llevar tus juguetes sexuales para estimularte o que te estimulen con ellos. Hay a quienes les gusta compartir el placer que le da su juguete con los otros asistentes a la orgía. Si este es el caso asegúrate de contar con preservativos o barreras de látex para evitar posibles infecciones de transmisión sexual. La protección es lo más importante, tanto para usar los juguetes como para la penetración o el sexo oral.

Si te decides a dar el paso y participar u organizar una orgía debes saber cuáles son las claves para hacerlo de forma segura: el consentimiento y la protección. Esos son los pilares fundamentales.

Sexo y drogas, la práctica que no pasa de moda

El Chemsex es el nombre que se le da a la unión de las palabras inglesas chemical y sex. Es el término que hace referencia a la mezcla de drogas psicoactivas para mantener relaciones sexuales durante un largo periodo de tiempo.
Fuente: Foto de Mart Production / Pexels.

Estas prácticas se caracterizan porque pueden durar desde horas hasta días, y porque se puede mantener sexo en pareja, en tríos o en grandes grupos. La página oficial Chemsex.com afirma que estas sesiones se dan principalmente entre hombres homosexuales, aunque cada vez se unen más personas con distintas orientaciones e identidades sexuales: bisexuales, mujeres trans, personas no binarias, queer…

Las sesiones se dan en fiestas sexuales, que se dan en casas privadas o en locales comerciales sexuales como hoteles, saunas, pisos de alquiler o clubs. En estas fiestas se mantienen relaciones sexuales extensas gracias al consumo de drogas.

Según la página Chemsex.com, el consumo puede darse individualmente, por ejemplo, de forma virtual, o con otras personas, como en el caso de parejas, tríos o grupos.

¿Cómo perjudica el Chemsex en la vida de las personas que lo practican?

“El chemsex es una práctica que debemos abordar no sólo desde la prevención de enfermedades infecto-contagiosas sino en relación a las consecuencias que puede ocasionar en la salud psicológica y social de las personas.”

José Luis Martín Herrero, enfermero CAD Arganzuela.

En las sesiones de Chemsex se practica sexo sin protección lo que desencadena en una gran cantidad de Infecciones de Transmisión Sexual como el VIH. Pablo Barrio, psicólogo en la asociación Apoyo Positivo, en una entrevista concluyó que en unos estudios realizados en el Centro Sanitario Sandoval de Madrid se encontraron con que hasta un 80% de las seroconversiones para la infección por el VIH podrían estar relacionadas con la práctica de chemsex.

Además de las claras ETS se dan otras consecuencias derivadas de esta practica sexual, como son:

  • El consumo diario de drogas, lo que conlleva a las adicciones.
  • Sobredosis y muertes en los peores casos.
  • Los problemas psicológicos y neurocognitivos.
  • La pérdida de interés y del deseo sexual cuando no se usan drogas.
  • Violaciones y abusos sexuales debido a la pérdida del juicio por las drogas.
  • La pérdida de la vida social, los problemas económicos, un menor rendimiento general, etc.
¿Cuáles son las drogas que más se consumen en el Chemsex y qué provocan?
Fuente: Foto de Mart Production / Pexels.

Las drogas más comunes en el Chemsex son la metanfetamina, el GhB y la mefedrona, las cuales se combinan con otras sustancias como la viagra, la ketamina, la cocaína o el Popper.

Según Cuídate Plus, portal web especializado en salud y enfermedades, el consumo de estas sustancias pueden provocar:

  • Adicciones. Debido a que cada vez necesitan consumir más sustancias para estas les provoquen el mismo efecto.
  • ETS o ITS. Al perder el juicio y el criterio no usan métodos de protección como preservativos.
  • Slamming. Los usuarios empiezan tomando dosis por la boca o por la nariz y terminan practicando el Slamming. Esta es la práctica que mezcla el sexo junto al consumo de drogas por vía intravenosa.
  • Coma etílico. El alcohol mezclado con el GHB puede provocar un coma etílico.
  • Quemaduras. El Popper puede provocar quemaduras si entra en contacto con la piel.
  • Episodios psicóticos. La metanfetamina tiene efectos de larga duración y puede llegar a generar episodios psicóticos.
  • Estrechamiento de las arterias. La mefedrona provoca episodios de vasoconstricción, es decir, se dan estrechamientos bruscos de las arterias. Además, es una sustancia que produce rápida tolerancia, lo que lleva a consumirla de forma más compulsiva.
  • Infartos, alucinaciones

A pesar de todas estas desventajas, en las sesiones de estas prácticas se siguen consumiendo estas drogas porque “les provocan sensaciones y emociones distintas”, como la euforia, la empatía, la estimulación de los sentidos, la falta de cansancio o el aumento del deseo sexual y del placer.

El chemsex es una práctica compleja, pero todos y todas las expertas coinciden en que es necesario implantar un tratamiento amplio con el objetivo de encontrar el bienestar de las personas que lo practican.

«Se debe dar una intervención multidisciplinar: Biomédica, psicológica y en el contexto social, para conocer los puntos de apoyos que tiene el paciente en torno a su relación con el chemsex”.

Pablo Barrio, psicólogo.

¿Cómo de buena puede ser la masturbación?

El onanismo o masturbación es la actividad sexual más frecuente entre los seres humanos. También es la más práctica, pues no depende de nadie más que del propio individuo. Estaba muy demonizada siglos atrás, pero poco a poco la sociedad ha ido normalizándola.

A día de hoy, esta normalización aparenta ser mucho más propensa en el sexo masculino que en el femenino, pudiendo llegar a considerarse incluso tabú. Sin embargo, según un estudio británico realizado en 2008 por la sexóloga Makeda Gerressu, no hay mucha diferencia entre ambos: Un 95% de los hombres aseguran masturbarse, frente a un 89% de mujeres. Ahora bien, ¿cuáles son los beneficios de la masturbación?

En primer lugar, a nivel sexual es bastante útil. Es una forma de autoaprendizaje y autoconocimiento para explorar nuestro propio cuerpo y experimentar con distintos gustos, además de conocer nuestras limitaciones. Es una forma de cumplir con la fantasía sexual de cada uno sin tener que depender de nadie ni comprometerse.

«La masturbación más que pedir fantasías las exige»

Nancy Friday

Según la escritora Nancy Friday «La masturbación más que pedir fantasías las exige», pues se cumplen en el momento y no hay que rendir cuentas a nadie. Además, la autoerótica incrementa el deseo sexual, siempre que no se practique de forma excesiva. No se puede ser infiel con la masturbación siempre que sea un acto individual y no implique a otra persona, sería como tratar de infidelidad a los sueños.

Dentro del plano psicológico, nuestra colaboradora la psicóloga Estrella Cubiles, afirma que provoca una combinación muy variada de sentimientos y emociones. Puede ir desde la culpabilidad y el rechazo a la satisfacción y el bienestar. Permite acabar con el estrés y liberar tensiones, lo cual es bastante recomendable dentro del trabajo.

Asegura también que esta práctica sexual mejora el sueño, lo cual es primordial, teniendo en cuenta lo que repercute dormir bien en el estado de ánimo. Es una dotación del ser humano a sí mismo para poder librarse de ese miedo interno que limita las relaciones sexuales, conociéndose más a sí mismo. Este autoconocimiento deriva en un aumento de la autoestima, como culminación de todos estos beneficios.

Fuente: Fotografía de Dainis Graveris / Pexels.

También implica una serie de ventajas en la salud física. La psicóloga Cubiles apoya la idea de que disminuye el riesgo de contraer un cáncer de próstata, o el de tener un infarto de miocardio, ya que la masturbación baja la presión arterial. También indica que posibilita mejorar el control de la vejiga por parte de las mujeres. Existen rumores de que con la masturbación se pierde testosterona, sin embargo, esta práctica sexual cuenta como ejercicio. No obstante, se recomienda no abusar de esta, y que se practique después de realizar los entrenamientos y no antes.

A pesar de todos estos beneficios, no se puede obviar la necesidad de una educación sexual en torno a la masturbación. Esto puede ser esencial para eliminar esas connotaciones negativas alrededor de esta, que solamente podrían ser reales en casos extremos de masturbación compulsiva o adicción.

Cultura No Fap
El youtuber Biohacker Extremo contando su experiencia tras 84 días sin masturbarse. Fuente: YouTube.

Se está extendiendo dentro de Internet una especie de filosofía de vida llamada No Fap. Como su propia traducción indica consiste en no masturbarse. Es uno de los resquicios que quedan de la demonización de esta actividad. Podría tener su origen en un desafío llamado No Fap September que surgió en la página 4chan. Este reto consistía en aguantar el mes de septiembre entero sin masturbarse.

Esta cultura la han impulsado varios youtubers que intentan cumplir con ese desafío, no solo un mes, sino 90 días. Cuando cumplen ese trimestre, extienden el reto al resto de su vida. Suelen culpar a la masturbación de aspectos como la abulia, la frustración sexual, el conformismo, el fracaso en el amor… Para ellos, el fin de la masturbación supone el fin de todos esos aspectos.

Si bien es cierto que masturbarse de manera excesiva y demasiado frecuente puede acarrear malas consecuencias, está demostrado que los beneficios de una masturbación controlada tienen mucha más presencia que sus posibles perjuicios.

Asexualidad: ¿amor sin sexo?

Cuando pensamos en la asexualidad nos limitamos pensando que simplemente es una persona que no se siente atraída sexualmente por nadie, pero esta orientación sexual engloba mucho más que eso. ¿Cuánto importa el sexo realmente?
¿Qué es la asexualidad?

La asexualidad es un tipo de orientación sexual como la heterosexualidad, la homosexualidad o la bisexualidad. Las personas asexuales se caracterizan porque no sienten deseo sexual por nadie o, en caso de sentirlo, lo hacen bajo unas condiciones concretas o en momentos determinados.

Según el ISEP, el Instituto Superior de Estudios Psicológicos, las personas asexuales pueden no sentir deseo sexual por otras personas, pero cabe la posibilidad de que sientan atracción romántica o intelectual.

A lo largo de la historia han existido personajes influyentes asexuales como Isaac Newton o Isabel I de Inglaterra. Según las personas asexuales, no es una orientación sexual que se vea respaldada por el colectivo LGBTQ+. Esto se debe a que parte del colectivo defiende que las personas asexuales no se han visto afectadas por discriminación social, política, económica o histórica.

Fuente: Foto de Anna Shvets / Pexels.

Las personas que pertenecen al colectivo asexual pueden ser hombres, mujeres o personas no binarias. Según un estudio realizado por Anthony Bogaert sólo un 1% de la población es asexual. Dentro de este porcentaje encontramos que el 20,2% son hombres, el 64,3% son mujeres y el 15,5% son personas no binarias y otros, según un estudio llevado a cabo por la ACEs (Asexual Community de España).

Tipos de asexualidad

Dentro de la asexualidad existe mucha diversidad y muchos tipos, pero los más estudiados según el ISEP son dos:

Grisexualidad (Gris-asexualidad)

Nos referimos con personas grisexuales a las personas que sí se han sentido atraídas sexualmente por otros individuos en algún momento puntual. La web especializada en sexología Lasexologia.com, lo describe como un punto intermedio entre la asexualidad y la alosexualidad, que es el término que se usa para describir a las personas que sí se sienten atraídas por otras.

Demisexualidad

La demisexualidad hace referencia a las personas que no experimentan atracción sexual a no ser que formen un fuerte vínculo afectivo o emocional con alguien.

Además de los dos tipos mencionados, los expertos en asexualidad clasifican dentro de esta a los asexuales arrománticos para definir a quienes no sienten atracción sexual ni romántica por nadie, a los asexuales heterorrománticos cuando alguien siente atracción romántica por alguien del sexo contrario, y asexuales homorrománticos cuando alguien se siente atraído románticamente hacia alguien de su mismo sexo.

Fuente: Foto de Uriel Mont / Pexels.
Se puede amar sin sexo

El sexo cada día es un tema menos tabú. Todo el mundo habla de tener relaciones sexuales y cuando alguien se muestra indiferente ante el tema se le señala como raro, por no cumplir con las expectativas sociales de que a todo el mundo le debe gustar mantener relaciones sexuales y, sobre todo, en la edad de la adolescencia. El porno, las redes sociales y la sociedad presionan muchísimo, e incluso en el pasado “las personas asexuales han sido patologizadas por no tener apetito sexual o por tener poco deseo erótico” explica la sexóloga Mª Victoria Ramírez Crespo.

Para conocer más sobre el tema, desde el equipo de Voz Nueva nos hemos puesto en contacto con Marina, una chica asexual de 21 años.

Marina es una chica que muy raramente ha sentido apetito sexual o deseo sexual por alguien. Hasta hace poco no ha sabido ponerle nombre a su orientación, ya que simplemente pensaba que no estaba tan interesada como sus amigos en el tema de tener parejas.

«Es cierto que en varias ocasiones me he llegado a plantear que quizás me pasaba ‘algo raro’ por no sentir este tipo de impulsos en una edad tan hormonal por así decirlo»

— Marina

Marina se describe como demisexual, ya que explica que solo ha llegado a sentir verdadera atracción sexual por una pareja estable y donde había una fuerte conexión emocional. Aunque también admite que ha llegado a sentir deseo en momentos concretos de su vida, pero la gran mayoría de veces se ha dado a raíz de tener un vínculo emocional con la persona que le atrae.

Una de las dudas que más personas tienen es sobre si las personas asexuales acuden a la autosexualidad, es decir, si se masturban. Marina afirma que lo ha probado, pero no es algo que haga habitualmente.

“Por pura curiosidad adolescente he probado alguna vez, quizás me vi un poco presionada en ese sentido al compararme con mis amigos. No puedo decir que jamás la haya ejercido ni me anime a intentarlo de otras formas ahora o en el futuro, pero tampoco he sentido ni creo que sienta nunca ese impulso sexual que te incita a hacerlo”, añade.

— Marina

La asexualidad es una orientación sexual formada por personas que experimentan atracción sexual hacia otras personas bajo unas determinadas condiciones y por personas que no se sienten atraídas de ninguna forma, independientemente de que hayan experimentado un vínculo emocional fuerte o no.

Aunque sea una orientación muy diversa, no se ha representado mucho ni se habla lo suficiente de ella, lo que hace que las personas asexuales se sientan un poco perdidas. “Siento que es andar un poco a ciegas al tener muy pocos referentes abiertamente asexuales. La considero una orientación muy poco representada”, confiesa Marina.

El punto A: la zona que te lleva a experimentar los mayores orgasmos

Todas y todos hemos escuchado hablar del punto G y del placer que este provoca. Pero, ¿cuánto sabes sobre el Punto A? Aquí te contamos todo sobre esta zona erógena que puede llevarte a vivir los mejores orgasmos de tu vida.

Hasta hace un par de años, los ginecólogos y sexólogos daban por hecha la existencia del Punto G. Pero un estudio británico que se llevó a cabo en 2009 demostró que la existencia de este punto estaba basada en experiencias personales. Aun así, hay muchas mujeres que dicen llegar al clímax con la estimulación del Punto G. Pero, ¿sabías que existe una zona erógena que te puede provocar mejores orgasmos aún? Aquí es donde toma protagonismo el Punto A de la mujer.

El Punto A femenino

Un estudio realizado en la década de los 90 por el doctor malayo Chua Chee Ann demostró la existencia de un nuevo punto erógeno, el Punto A o AFE (Anterior Fornix Erotic Zone). Esta zona fue descubierta mientras estudiaba la sequedad vaginal. El doctor vio que cuando estimulaba dicha zona las mujeres producían mucha lubricación debido a una gran excitación e incluso llegaban a tener varios orgasmos.

¿Dónde se ubica el Punto A?

Según Ava Cadell, consejera sexual certificada y fundadora de Loveology, el Punto A se encuentra a 7,5 centímetros aproximadamente de los labios vaginales y a pocos centímetros del Punto G, entre el cuello uterino y la vejiga.

Representación del Punto A en la vagina. Fuente: Ron Lach / Pexels.
Beneficios de encontrar el Punto A

Los sexólogos dicen que encontrar el punto A puede ser complicado y que, de hecho, no todo el mundo lo encuentra, pero “si das con él puedes vivir un cúmulo de sensaciones espectaculares” dice la sexóloga Zoraida Granados.

Según el estudio llevado a cabo por Chua Chee Ann y los posteriores llevados a cabo por otros expertos, lo que caracteriza la estimulación de esta zona es el nivel de excitación que puedes conseguir y la posterior lubricación como respuesta a dicho placer. Ese placer va aumentando con la estimulación del punto y puede llegar a provocar hasta múltiples orgasmos. La sexóloga Zoraida Granados añade que los orgasmos que provoca son más prolongados e intensos que los que se tienen normalmente.

La investigación de Chue Chee Ann mostró que dar con este punto correctamente podría acabar con la anorgasmia. En el estudio consiguió,con una correcta estimulación de la zona, que personas que nunca habían tenido un orgasmo, llegasen a tener sus primeros orgasmos.

¿Cómo puedes encontrarlo?

Según los expertos y expertas dar con este punto puede ser un poco complicado, es por esto que aconsejan una serie de posturas y técnicas. Esta zona puede estimularse con los dedos, con juguetes sexuales o con el pene.

En el caso del pene y los juguetes sexuales las posturas que recomiendan los expertos son “el perrito” o el “misionero” si te colocas una almohada o cojín para levantar tu pelvis. Son estas las posturas que se recomiendan porque se produce una mayor penetración en ellas.

Si vas a experimentar tu sola o con los dedos de otra persona Zoraida Granados recomienda tres posturas:

“La mujer boca abajo y su pareja detrás de ella, de forma que los dedos toman mayor movilidad; la mujer sentada en el borde de la cama y la pareja sexual arrodillada delante; y la mujer en posición de ‘4 patas’ y su pareja sexual tras ella, con la misma ventaja que en la primera, aunque con mayor profundidad”.

Fuente: Anna Shvets / Pexels.
Fuente: Anna Shvets / Pexels.

El placer es subjetivo y un término muy amplio. Además, cada cuerpo es diferente al resto, lo que influye a la hora de encontrar el punto A. El científico italiano Emmanuele Jannini en una investigación mostró que cada mujer llegaba al orgasmo de manera distinta y con la estimulación de diferentes zonas. Encontrar el Punto A en las mujeres puede ser una explosión de sensaciones placenteras, pero si no lo encuentras no te preocupes, habrá otras zonas erógenas o técnicas que te lleven a vivir esos orgasmos. “Todo depende de conocerte y conocer tu cuerpo” dice la sexóloga Sonia Encinas.