Poco a poco, el lucir unas manos perfectas se ha vuelto parte importante de nuestras rutinas de belleza. Cosa que se vuelve muy difícil con la existencia de desconchados, manchas o lacas que no duran ni horas aplicadas. ¿quieres conocer algunos tips para poner remedio a estos problemas? Quédate en este post y descúbrelos.
Si te gustan las manicuras de larga duración o permanentes pero no quieres estropear tus uñas o ir a centros, hoy veremos diferentes técnicas para cuidar, tratar, y mantener tu manicura por más tiempo. Estos trucos te servirán para lucir unas manos más sanas y bonitas.
Antes de comenzar
Antes de comenzar el proceso de la manicura, debemos tener en cuenta el cuidado de nuestras uñas, por lo que te recomendamos :
Ten las uñas limpias. Quita los restos del anterior esmalte con un algodón y quitaesmalte, preferentemente sin acetona. Con esto, conseguirás tanto eliminar las capas anteriores de pintura, polvo o grasa.
Tras ello, procura lavarte e hidratarte las manos. Incluso puedes usar cualquier tipo de exfoliante natural, una vez en semana.
Por último, cuida tus cutículas con aceites, así manteniéndolas hidratadas para que el esmalte no se agriete. Antes de empezar con la manicura, se recomienda utilizar un quitacutículas durante al menos un minuto. Este producto las ablandará, por lo que a la hora de empujarlas hasta la matriz de la uña, evitarás romper la piel y conseguirás una duración mayor del esmalte.
prepara la base de la uña
Una vez hidratadas, es hora de dar una forma concreta a las uñas. Límalas de la forma que más te guste: Almendradas, redondas, cuadradas, balerinas… Tras ello, aplica un esmalte base o Base Coat. Este producto evitará que la uña se dañe, se amarillee y hará que la laca permanezca durante más tiempo en la uña.
Este tipo de bases las puedes encontrar en tiendas como Primor, Kiko, Sephora o cualquier perfumería. En marcas como: Essence (2,99€) , OPI (15,95€), Catrice (3,99€), MIA (9,95€) y muchas más.
hora de aplicar el esmalte
Ya tenemos lista la uña y es hora de aplicar nuestro esmalte favorito. Debemos hacerlo de forma uniforme por toda la uña. Aplicamos desde la raíz hacia el centro y luego los laterales. Tras esto, dejaremos secar, y repetiremos la operación, así teniendo un total de dos o tres capas de esmalte en cada uña. Las capas de esmalte han de ser finas, ya que si lo aplicamos en gran cantidad, este, se desconchará rápidamente. Por otro lado, debemos repasar los bordes de las uñas, para evitar que el color salte.
Finaliza el esmaltado
Para finalizar , al igual que el Base Coat, aplica un Top Coat, de secado rápido, que aportará un extra de duración y brillo a tu manicura, protegiendo el color y evitando el desgaste de esta.
Puedes encontrarlos en perfumerías y tiendas de maquillaje en marcas como Beter (3,99€) , Revlon (5,45€) o Rimmel (7,5€)
respeta los tiempos
Recuerda, entre capa y capa, has de dejar un tiempo de secado, para oxigenar la uña y permitir que la laca se adhiera a la superficie perfectamente. Con la Base y Top Coat, es exactamente igual. Si el esmalte no está bien seco, evita el agua caliente, puede hacer que el color se desprenda. Para acelerar el proceso de secado, puedes utilizar productos o distintas herramientas. Como lámparas o esmaltes especializados.
Una vez términado el proceso
Una vez completado el proceso de hidratación, cuidado, esmaltado y secado de las uñas, puedes añadir cada dos días o tres una capa de Top Coat, para añadir un plus de fijación y brillo a tu manicura.
Una vez analizados estos trucos, es hora de que empieces a hacerte tus propias manicuras sin agobios ni estrés. ¡Cuida tus manos y lúcelas como más te gusten!