El deporte español ha tenido que adoptar nuevas medidas por el avance del coronavirus. Las distintas competiciones y equipos continúan sobreviviendo a los baches del virus dado que la mayoría de los clubes han registrado algún positivo, manteniendo las disciplinas y protocolos marcados por la Federación de fútbol.
Las diferencias entre las ligas profesionales masculinas y femeninas se han visto salpicadas por la polémica. La Primera Iberdrola emitió este sábado un duro comunicado en el que las futbolistas reclaman “garantizar que la competición pueda llevarse de manera continua y evitar así una liga adulterada y llena de incertidumbre”, además de la suspensión de encuentros cada jornada desde el comienzo de la competición. La primera división femenina ha suspendido 27 partidos en lo que lleva de temporada por la Covid-19. Las jugadoras piden que se disputen los encuentros de la primera vuelta y que se juegue el partido en cuestión si ambos equipos disponen del mínimo de jugadoras para hacerlo. Sin embargo, la respuesta de la Federación de fútbol fue la contraria a la esperada, indicando que no habrá cambios en el protocolo, el cual a partir de la séptima jornada obligaba a realizar tan solo un test antes de empezar la jornada.
El FC Barcelona, por ejemplo, ha sufrido la suspensión de cinco partidos en lo que va de temporada. Pero el inconveniente no son las numerosas suspensiones de encuentros, ya que entienden que la prioridad principal es la salud, sino que atentan contra el poco margen respecto a la sospecha de un positivo. Fue el caso del Real Madrid-EDF Logroño, en el que no se jugó el encuentro porque el jefe de prensa del Logroño tuvo contacto estrecho con un positivo. En cambio en el fútbol masculino, primera y segunda división, los partidos se pueden disputar aunque se detecte algún positivo en la plantilla. Un ejemplo reciente es el de Mario Hermoso y Carrasco, jugadores del Atlético de Madrid que dieron positivo a 48 horas del encuentro. Pese ello, el Cádiz-Atlético de Madrid siguió adelante y el partido pudo disputarse con normalidad. Las jugadoras hicieron visibles sus protestas en los partidos de este fin de semana, quedándose paradas los primeros segundos de los partidos para reclamar un nuevo protocolo.

Luis Rubiales y la Federación Española de Fútbol respondieron a este toque de atención asegurando que priorizan la salud en la competición femenina. Además, se convocará para el próximo martes a la Junta de División para la Competición Profesionalizada de la RFEF, compuesta por Federación y clubes para atender todas aquellas propuestas posibles. Por último, hace hincapié en el criterio médico que se ha llevado a cabo así como la igualdad entre las categorías masculinas y femeninas.